Apenas si tiene los 21 años, por eso nos preguntamos: ¿Se puede ser más joven? Sí, se puede. Y en el caso de Sophie Turner tuvo una etapa en la que tenía aún más rostro angelical. La vimos crecer frente a nuestros ojos, en la pantalla de HBO, a lo largo de siete años, pero vayamos más atrás en el tiempo, antes de que se convirtiera en esa pelirroja a la que hoy el mundo conoce como Sansa Stark.
Aprovechando que Game of Thrones no regresa hasta 2019, veamos algunas fotos de la infancia/juventud de Sophie, sólo por el gusto que da verlas… ¡Tan tierna!