La sexta temporada de American Horror Story comenzó con todo. En realidad empezó mucho antes con la decisión de los creadores de realizar múltiples teasers y posters para ir publicitando esta nueva temporada.
Ya van ocho episodios de esta temporada donde sabemos que Roanoke es el eje principal. Y nos atrevemos a considerar ya a esta instancia que Roanoke se está convirtiendo en la mejor temporada de la serie. Por eso ahora te vamos a contar porque para nosotros es así.
1 Nada es seguro
Si bien una de las grandes características de Ryan Murphy es innovar con sus productos, con esta nueva temporada de AHS lo logró.
La serie comenzó como un gran enigma ya que no sabíamos sobre qué trataría. Finalmente, ya con el primer capítulo transmitido, la nueva temporada seguimos sin saber del todo que es lo que sucederá, todo puede cambiar. Esto es en parte a la forma en que se está contando la historia ya que no está definido qué pasará en ningún momento. Todo vale. Y con el sexto episodio de la temporada confirmamos esto.
2 Otra forma de contar una historia
Esta sexta temporada no sólo es enigmática en cuanto a la trama sino también en la forma en que decidió contarse. Todo comenzó con My Roanoke Nightmare donde tomando hechos reales, que desarrollaremos más adelante, también cambia la forma en contar todo.
Los primeros cinco capítulos transcurren como un documental donde parte del cast representa a los verdaderos protagonistas de la historia, el matrimonio Miller, Shelby (Lily Rabe) y Matt (Andre Holland), el mismo que sufrió en carne propia una verdadera pesadilla en la casa que habían comprado. Al mismo tiempo podemos ver las recreaciones de la mano de otros actores que los interpretan… Pero a partir del episodio 6 todo cambió y la serie se convirtió en un reality show.
3 La ficción se viste de reality
Aquel documental que nos tenía tan intrigados, al punto que cuando terminaba el episodio no podíamos entender que ya haya pasado una hora, se convirtió en un reality de lo más sangriento.
Esto nos mostró una nueva cara de los actores exceptuando a Lily Rabe, Andre Holland y Adina Porter que interpretan a las personas reales que vivieron todo. A partir de este momento Sarah Paulson, Cuba Gooding Junior, Angela Bassett, Kathy Bates y Evan Peters son actores que interpretaron el documental, teniendo así un doble personaje a lo largo de la serie. Lo mejor de esto es el caso de Bates, quien interpreta a La carnicera y vemos cómo ese personaje le comió la cabeza al punto que ella siente que realmente es la carnicera… aunque quizás no lo crea: quizás fue realmente poseída por La carnicera.
Todo puede ser en esta temporada, por eso se va convirtiendo en nuestra favorita.
4 Recursos del falso documental
Esta serie tiene mucho puntos en común con las películas de falso documental que tanto éxito tuvieron años atrás. Ver cómo todo cambia y de golpe los actores acceden a convertirse en un Gran Hermano, pero donde todo lo extraño puede pasar, nos atrapó. Más aún: la placa donde revelan que todos los actores fueron asesinados y encontraron los videos sólo genera más curiosidad. La ficción logró que ella misma se confirmara como lo que inicialmente se contara fuera real.
5 Detrás hay una historia real
Detrás de todos los sacrificios de tierra, la bruja del bosque y los antiguos dioses hay una historia real. La colonia Roanoke realmente existió, tal como lo manifiestan en la serie. La isla de Roanoke se ubicaba en el condado de Dare, que actualmente es Carolina del Norte. Sí, el lugar donde Shelby y Matt deciden comprarse la casa. Originalmente esta colonia fue un intento de la Reina Isabel I de establecer un asentamiento inglés permanente en América. Lo que siempre llamó la atención de esto es que el último grupo de colonos desapareció durante la Guerra anglo-española. A partir de su desaparición se originó el sobrenombre de La colonia perdida.
Es más, hasta el día de hoy muchas son las teorías sobre el destino final de estos colonos. ¿Ryan Murphy había atinado en su respuesta?
6 Volver a los inicios
También otro gran factor que tiene esta temporada es que, en cierta forma, retoma algunos puntos de la primera temporada. Matrimonio que compra una nueva casa, en realidad mansión, y esta está embrujada. Pero no sólo por lo colonos sino también por otros espíritus de quienes intentaron habitarla antes. Clara referencia a Murder House, ¿no?
Por eso nos gusta tanto: retoma esa esencia que le dio vida y no sólo la mantiene, la vuelve más sádica, más oscura y más peligrosa, al punto que nos atrapa sin que notemos el paso del tiempo y que sólo queremos saber qué es lo que pasa. Además que por primera vez todos corren riesgos, menos uno.