7 grandes traiciones seriéfilas

Las traiciones en las series, como en las tragedias griegas, son un mal clásico y necesario.

Aquí te dejamos 7 históricas:

Si bien se nos hace imposible apuntar con el dedo a Lori por las necesidades que en ese entonces tenía… lo que hizo es, sin dudas, traición: Lori daba por muerto a Rick, su esposo y Shane -un personaje realmente atractivo y protector- se encarga de salvar a la familia de su mejor amigo y así fue como, casi sin querer queriendo se enamora de Lori y posiblemente la embaraza (¡jamás lo sabremos!). Si hay alguien que más metió la pata en este triángulo es Shane: fue él quien le dijo a Lori que su esposo estaba muerto aún sabiendo que existía una mínima chance de que estuviese vivo… y ese fue el resultado. Los rostros de Shane y Lori cuando Rick vuelve… ¡no tienen desperdicio!

La Boda Roja se convirtió en un evento de la televisión mundial: nos hizo llorar, patalear, insultar y odiar el guión. La Boda Roja se trata de una terrible traición por parte de los Frey hacia la familia Stark. Lord Walder Frey (David Bradley) se une a Tywin Lannister para asesinar a sangre fría a todos los Stark presentes en el festejo; en venganza a Robb Stark (Richard Madden), quien no cumplió la promesa de matrimonio cometiendo una terrible ofensa. Como resultado la mujer y el primogénito de Stark mueren, al igual que Lady Catelyn (Michelle Fairley).

Repasamos una de las escenas más viralizadas en los últimos tiempos, con la explicación de los productores:

Livia, la madre de Tony se ha ganado el podio a la peor madre de la televisión. No podemos olvidar la conversación que mantiene con Junior, su cuñado, en la que insinúa que deberían matar a su hijo: el que la visita a diario, el que le lleva regalos, el que la invita a las reuniones familiares -a pesar de que nadie la quería- y el que soportaba sus malos tratos desde que tuvo uso de razón. Por supuesto que Tony se entera de esta terrible actitud y ¡le canta las cuarenta a su madre en sus últimos días de vida!

En el final de la segunda temporada tanto Carrie como Hood trabajan para Rabbit haciendo algún que otro trabajo sucio y, mientras tanto, esconden en secreto su romance. Rabbit les asigna una tarea específica: robar unos diamantes. ¿Pero qué sucede? La pareja pretende robarlos, escapar y desaparecer juntos. Sin embargo, Rabbit nunca fue ningún tonto: el mafioso tenía sus propios planes; entregarlos a la policía, que Hood vaya a prisión por mentirle y así castigar a su hija por traición. Hace el llamado, denuncia el robo y jamás les da tiempo a escapar.
¡Bien hecho Rabbit!

La temporada cinco de Supernatural inicia con el Apocalipsis en la tierra y con los hermanos luchando para salvar la humanidad -una vez más- por una terrible traición llevada a cabo por el demonio Ruby (Genevieve Padalecki) a Sam (Jared Padalecki). Ruby se encargó de acompañar a Sam durante varias temporadas: lo ayudó a sobrevivir enseñándole nuevos trucos, entregándole un cuchillo que mataba a los demonios y, a su vez, se involucran en un amorío. Pero… algo sucede: todo muy bonito hasta que, en la batalla final, donde Sam se enfrenta a Lilith (Katherine Boecher) y la asesina, descubre que Ruby le mintió todo ese tiempo y la muerte de quien Sam consideraba su peor enemiga, en realidad era la llave para abrir las puertas del infierno y liberar a Lucifer.

¡El padre más malo de todos, sin dudas, es el de John Locke en Lost! El pobre Locke devenido en hombre adulto, se entera luego de pasar por varias familias quién es su padre biológico. Ok, lo busca, lo encuentra y, si bien el querido Cooper al principio parecía un señor inofensivo, amable y un simple solitario como detalle distintivo, en verdad fue terrible vivo: sólo quería tener una buena relación con su hijo para que éste le donara un riñón ya que Cooper estaba atravesando una grave enfermedad renal. ¡Qué conveniente! ¿Verdad, Cooper? Bien. Luego de un par de salidas familiares John le ofrece su riñón y proceden con el trasplante pero… cuando él despierta su padre ya no estaba al lado de su cama: Anthony Cooper había desaparecido de su vida… al menos por un tiempo.

Tiempo después John se encuentra con Cooper nuevamente y, en una maniobra intensa termina lanzando a su hijo desde lo alto de un edificio, dejándolo paralítico para siempre… o más bien, hasta que éste llegue a la isla.

¡Pero qué viejo desgraciado!

Jimmy desde muy joven admiró la figura y reputación de su hermano Chuck McGill, uno de los mejores abogados de Albuquerque, Nuevo México. Por supuesto que Jimmy no ha tenido su misma suerte, de hecho, su camino siempre se dirigió al fracaso pero, eso no quita que tenga un gran corazón de oro. Jimmy se esforzó por seguir los pasos de su hermano y luego de mucho esfuerzo consiguió su título en leyes, resultando en el chiste de la familia según Chuck. Cuando Chuck contrae una enfermedad psicológica que lo impide salir a la calle -por una supuesta hipersensibilidad a la luz- Jimmy lo visita diariamente para atenderlo, cuidarlo y comprarle todo lo que necesite. Como si esto fuera poco, consigue un caso espectacular contra un geriátrico, caso ideal para venderlo a la firma de Chuck… perfecto, cuando esto se lleva a cabo, los abogados exclaman una única petición y es que Jimmy no sea contratado. Al poco tiempo, Jimmy descubre que la condición en verdad la había puesto su cobarde, cruel y traidor hermano.
¡Maldito, Jimmy es sólo un pobre incomprendido!