Muchos terminamos de ver Say Yes, duodécimo episodio de la séptima temporada de The Walking Dead, apagamos la TV o aplicación de la PC y pensamos que más vacía la cosa no podía ser… ¿pero fue así? No, sin dudas que no: el episodio estuvo cargado de emotividad, líneas paralelas y vueltas que lo hicieron bastante mejor de lo que pensamos.
Por eso en este artículo te dejamos 7 razones por las cuales Say Yes fue un digno episodio de la serie furor del momento.
1 No fue un capítulo de Richonne y punto
Sí, así como lo leen: el que diga que fue un capítulo sobre la pareja principal es porque su nivel de hater es épico. Sin dudas Say Yes ocupó gran parte de sus minutos en ver la humanidad que queda en Rick (sí, más en Rick que en Michonne… recordar el momento en el que el héroe le dice a Michonne que relaje esa noche), pero ¿y los momentos de Rosita? ¿Y los momentos de Tara?
Seamos justos, no fue un ‘capítulo de’ como tantos otros, fue global.
2 La micro historia del venado
Sí, fue una micro historia. Y muy buena, para nuestro gusto. El mismo venado que salvaría la vida de los sobrevivientes como comida salvó a Rick de ser comida de los walkers. Es como que en Say Yes nos dieron a entender otra vez, como en los viejos tiempos, que todo se recicla, que todo cambió en el mundo apocalíptico. Y nos parece fantástico.
3 Al fin, ¡walkers!
Sí, hacía tiempo que no veíamos un cuerpo a cuerpo o tensión entre los sobrevivientes y los walkers de a pie. Y en Say Yes se volvió a dar. ¿Cuántos caminantes fueron ejecutados por la pareja de Rick y Michonne? Muchísimos. A su vez, ¿hace cuánto que no veíamos esta acción? Muchísimo también. Y no vale contar la épica matanza hecha por ambos en Rock in the Road, no es lo mismo.
4 Volvió Judith
Unido al punto 1 de esta suerte de defensa del episodio, va este comentario: ver a Judith otra vez nos hizo bien. Al fin se pudo ver algo más allá de la futura Guerra, la trama de Negan y Los Salvadores, las preguntas hacia los aliados. Como tantas veces lo dijimos, para hacernos bien o para hacernos mal, The Walking Dead es una serie sobre la familia, y que aparezca la pequeña es una bocanada de aire.
5 La dialéctica fluyó nuevamente
Diálogos logrados, escenas con profundidad narrativa… Al fin volvimos a tener lo que a muchos molesta pero que realmente suma y nos acerca a nuestro tan querido cómic: los pensamientos de los sobrevivientes, cómo desarrollarse en el nuevo mundo apocalíptico y narrar lo que sucede en el ahora volvió a formar parte de los personajes.
6 Se vio un costado olvidado
Rick y Michonne llegan a la Feria; Michonne apunta a un juego de puntería; los dos sonríen. Hacía tiempo que no había un momento de distensión en la serie, un punto de relax ante tantas preocupaciones. Y esto también llevó a lo explicado en el punto anterior. Todo se termina uniendo.
7 Tres cliffhangers en un solo capítulo
No uno, tres. Sí, eso es genial, abre puertas y no nos delimita en cuanto a la narración. ¿Qué pasará con la nueva Comunidad del Basurero? ¿Tara revelará la ubicación de Oceanside y se conseguirán nuevos aliados o futuros enemigos? ¿Sasha y Rosita irán a su propia Guerra personal y sucederá la muerte de un personaje principal? Sí, así de simple: tres cliffhangers que, a su vez, no serán resueltos en el próximo episodio.
Al fin, The Walking Dead, al fin.