8 razones para ver Empire

Hoy voy a hablar de Empire, la serie de Fox de la que todo el mundo habló durante el 2015, por supuesto, que tanto para bien como para mal. Lo cierto es que se estrenó en Estados Unidos con casi 10 millones de espectadores: nada mal.

Y es que Empire viene a ser ese guilty pleasure del que todos disfrutamos. Si bien no pasará a la historia como una las grandes series tipo The Wire o Los Soprano -tampoco lo pretende-, se ha convertido en una soap opera de lujo, o sea: un culebrón con glamour.

Aquí les dejaré 8 razones por las cuales debieran ver Empire.

Si bien no soy fan del hip-hop, el presente en la serie es bastante pop y light: la mezcla de canciones originales de temática r&b y hip-hop es perfecta. Además, otra parte buena del aspecto musical es que no resulta excesivo como en otra series donde las canciones dejan de tener sentido dentro de la trama sino todo lo contrario: en Empire cada canción tiene su porqué en la historia.

A pesar de que la música y las actuaciones son una parte importante, su foco central es el negocio de la música, ofreciendo un espectáculo que no desentona con el trasfondo ya que es el mundo donde se mueve Empire.

Afortunadamente las relaciones homosexuales mostradas en televisión han cambiado a lo largo de los años, Jamal y Michael son un buen ejemplo de ello: se muestran acaramelados y lo que es más importante, de forma natural, lo cual hace unos años hubiese sido imposible de trasmitir entre dos chicos.

Sin embargo, la relación de Jamal con su padre lo hace todo mucho más difícil: Lucious amenaza con desheredar a su hijo si hace pública su condición sexual. Un hecho poco tratado dentro de la comunidad afroamericana que dará mucho que hablar.

Una de las tramas fundamentales de Empire es la relación que tiene el poderoso Lucious Lyon con sus tres hijos: por un lado no está conforme con la vida de Jamal diciendo que ser gay es una opción y es por eso que la confrontación entre ellos es constante… por otro lado si bien confía en el talento de Hakeem para lanzar su primer sencillo, su juventud le juega una mala pasada… y por último, Andre se convierte en su mano derecha, haciendo lo que sea necesario para tener contento al patriarca y esperar que se acuerde de él cuando llegue el momento de delegar el mando de la empresa.

Terrence Howard apuesta a la pantalla chica. Visto en películas como Sabotage, Into the Woods, El reencuentro, Prisioneros, El Mayordomo o Iron Man, ahora se adentra en la televisión dando vida a Lucious Lyon, el rey de la música y un personaje dramático perfecto para el actor.

Si estabas buscando a la próxima diva de la televisión, Cookie Lyon (Taraji P. Henson) es la perfecta candidata. Cuando la vemos por primera vez nos damos cuenta que se trata de un animal psicótico con una fuerza y un aplomo increíble. Su forma de ser tan directa, su carácter tan coloquial y sus ganas de recuperar lo suyo hacen que Cookie se convierta en uno de los personajes favoritos de muchos: nada como una madre dominante y tierna a la vez para que todos nos enamoremos.

No sé ustedes, pero yo jamás había pensado en la homofobia dentro de la comunidad afroamericana y una de las cosas que me ha llamado la atención es justamente el trato del tema: la visualización de los gays es el mejor modo de desestigmatizarlos y, el personaje de Jamal, es perfecto para ello.

En Empire lo bueno está en el desarrollo de la historia y la forma en que se mixturan todos los conflictos: consiguen un buen resultado trazando una línea delgada entre la empresa y la familia, lo cual es perfecto para la audiencia.

Nadie podía pronosticar el éxito de Empire cuando se entrenó en Enero de 2015, sin embargo, las redes se han encargado de posicionar a la serie hasta lo más alto en muy poco tiempo.

Y es que en los primeros capítulos Empire hizo todo lo que una buena serie hace: dejarte con ganas de más exponiendo bien la trama, el argumento y los personajes desde un principio.