El próximo capítulo de Arrow será el último de la temporada y si bien las pasadas semanas mejoraron en un montón de cosas, esto hace que parezca que falta para el final de sexto año de la serie. Es como que venían a un paso muy lento, haciendo que todos se peleen provocando que nos enojemos y ahora, cuando se encaminaron, parece que necesitamos más. Pero esto no será posible y Ricardo Díaz lo sabe así que aceleró todo luego de que el juicio salga mal y fue por todo. No sólo por la cabeza de Oliver y el Team Arrow, sino que también quiere convertirse en el rey del “underground” mundial tomado control del Cuadrante.
Durante el episodio de esta semana tuve miedo por la vida de Anatoly. Él es un personaje que viene acompañando a Oliver hace mucho tiempo y si bien tuvieron sus momentos de tensión, últimamente terminó de hacer las paces con su “hermano”. Ahora está jugando con fuego, ya que quiere ayudar a Ollie a sobrevivir a The Dragon y para esto se pone en riesgo muy seguido. Por suerte es bastante inteligente a la hora de improvisar, pero no me extrañaría con muera. Ellos recorrieron mucho juntos, se salvaron, se pelearon, amigaron, volvieron a pelear y sería un círculo completo que lo último que haya hecho Anatoly sea redimirse ante los ojos de él. Entonces, si sigue traicionando a Ricardo, puede que no viva para contarlo otra vez.
Anatoly logró desviar la vista de él y enfocarla en El Cuadrante. Tenía mucho sentido lo que decía porque si lo hacían ver débil, eso ayudaría a su causa para tomar control real de la ciudad porque Ricardo debería pedir asistencia para lidiar con todo. En vez de asustarse, Richard siguió haciendo lo mismo que venía haciendo desde que comenzó su paso por la serie y usó la violencia e intimidación como herramienta para lograr lo que quería.Hace unas semanas mató a un integrante de la organización más poderosa del mundo y en este capítulo mató a otros dos para quedar a cargo de todo. Un poco de credibilidad le saca esto, porque para ser tan poderosos, son bastante débiles, pero bueno, la excusa es que The Dragon empezó desde abajo y no le tiene miedo a ensuciarse las manos, así que por eso es mejor, pero eso no quita que podrían estar un poco más protegidos.
Ahora sólo le queda poder llevarse puesto a Oliver y compañía que es algo que durante este episodio trató de hacer pero gracias a la unión del team, no pudo. Entonces, es momento de hablar de eso, de que después de mucho tiempo pudimos ver otra vez al equipo unido y si bien no es algo oficial que se quieren todos, hay respeto y es lo único que me importa. No sólo por parte de los que supieron ser reclutas, sino que también de parte de el ex líder del team y sus miembros originales. Hoy volvimos a los mejores tiempos, pero como hay un poco de tensión en el aire todavía, no hay lugar para chistes y sólo se ocupan de lo que realmente importa. Así que hasta me animo a decir que prefiero esto.
Con el “““Team Arrow””” contra las cuerdas, no les quedó otra que trabajar juntos y aunque algunos tenían sus objetivos en el lugar incorrecto, como Curtis, lograron sacarlo adelante. Si bien entiendo que Curtis se enoje, la realidad es que quedó todo muy fuera de personaje ya que él es todo lo contrario a lo que vimos. Hace unos capítulos entaba encaminado a Dinah, él es el único que nunca tuvo un problema real con Oliver y es “el bueno” del equipo, así que no me gustó que lo hagan estúpido porque eso podría provocar su muerte y aunque a muchos no le molestaría, no se la merece. Igual, gracias él descubrimos que existe una manera de destruir a Ricardo Diaz y aunque sería bastante anticlimático, eso solucionaría muchos problemas.
Richard tiene un pendrive con todos sus libros de contabilidad y su red entera, así que si lograsen filtrar eso a la prensa, eso haría que todos los corruptos de la ciudad queden expuestos y le devuelva a Oliver su credibilidad y hasta el puesto de Alcalde. El tema es que para conseguir lo que quiere, Ollie tendrá que pedirle ayuda a alguien que quería verlo tras las rejas. No sé cómo funcionará una alianza entre Watson y Oliver, más que nada porque ella lo quería preso y que sea The Green Arrow, sólo confirma lo que ella deseaba. Quizás, logra entender que este vigilante hace todo lo que tiene en su poder para proteger la ciudad, quizás entiende su causa y aunque no la aprueba, logra entender que la gente como Oliver debería ser premiada y no perseguida por la justicia.
Lo último que podría comentar es que la relación de Felicity y Oliver estuvo en el centro de atención del episodio y no molestó para nada. Les costó, pero los guionistas lograron que “Olicity” madure y eso es algo muy complicado de hacer, pero ellos lo hicieron. El tema es que Ollie está muy protector y no quiere que ella se ponga en riesgo porque si a él le llegara a pasar algo, Felicity debería cuidar a William. El problema de esto es que aunque ella quiera mucho al niño, lo que más importa hoy es poder salvar la ciudad y si puede hacer algo para que The Dragon deje de molestar lo hará.
Esto la puso en peligro y Oliver odió eso, pero lo que ellos deben aprender es lo que Lyla y John nos vienen enseñando hace años, que si bien ella es una mujer que entrenó para estar en el campo de batalla y que eso ayude mucho a la conciencia, cuando trabajan juntos son imparables. Entonces, Olicity debe llegar a ese punto y aunque a Ollie le moleste, esta guerra es de ella, tanto como de él y del resto del team porque Ricardo no está amenazando a solamente al ex alcalde de Star City, sino que se quiere llevar el mundo por delante y esa no es una opción. Así que correte Oliver y deja que Felicity haga lo que quiera.