Bienvenidos a la intriga, espionaje, guerra fría, la suerte de un mundo que se debatía segundo a segundo, manejado por los más expertos agentes secretos… Eso por allá. Por acá el servicio secreto francés, año 1960. Una cueva de machistas, chauvinistas, burócratas, ineptos y queridísimos personajes.
1 Au Service de la France!
Todo empieza cuando a Merlaux le quitan la capucha que lo enceguecía; está desnudo, lo han secuestrado, lo pueden torturar… pero no. Le dan la bienvenida al Servicio Secreto francés, a prueba, con salario mínimo, claro. Luego de aclarar que no vio a nadie siendo brutalmente torturado en una oficina (ejem…), se dirige a cumplir con la burocracia. Justamente, la obediencia a las reglas es lo principal en la agencia: si no está sellado no existe; el teléfono no se atiende solo porque suena; tiene que haber una orden; cualquier trabajo puede tener paga de extras (por millas, uso de armas, etc.).
Los problemas de la coyuntura internacional los mantienen ocupados, pero también el frente interno francés-argelino (porque Argelia es Francia) e interno dentro de la propia oficina.
La serie trata los temas del contexto de la época de una forma magistral, demostrando que el momento cultural-social era imbécil a los ojos de hoy día (racismo, chauvinismo, machismo, divisiones políticas y largo etcétera).
2 Hay tres agentes que tienen repartidos los frentes
Moulinier es el que manda en África y debe lidiar con la corriente independentista; Calot tiene a su cargo el este de Europa en medio de la Guerra Fría; Jacquard maneja Argelia (porque Argelia es Francia). De la triada, dos son bon vivant y mujeriegos; obviamente el que trabaja detrás de la Cortina de Hierro es frugal, abúlico. Todos pelean por los pagos extra por viaje, zona peligrosa, etc..
Los superiores son Moise y por encima de él Mercaillon. Estos dos se la pasan peleando, porque el primero sabe que el segundo fue colaborador nazi, pero se termina demostrando que la necesidad política es más importante que la ética.
La época juega su propio papel en el show, definitivamente. Se vive, no solo la ola independentista en África, sino la Revolución Cubana, la creación de la OAS, las guerras en Cercano Oriente y la construcción del Muro de Berlín (brillante momento cuando no hallan el coche estacionado). Sumemos a todo esto liberación femenina y sexual. El tratamiento es algo así como el punto de reacción de los dinosaurios que no quieren evolucionar y por ello se hace tan entretenido.
3 Ellos, los personajes principales de las primeras 2 temporadas
- Merlaux: El joven que ingresa, aparentemente por azar, al servicio secreto.
- Moise: El superior directo del personal. Moralmente impecable, tiene una agenda secreta, pero es por ser correcto. Su vida privada se devela y cada vez que quiere confesarla algo pasa que le saca la atención. Tiene un loro de mascota que es usado para dejar mensajes (como si fuera un contestador automático).
- Mercaillon: Es el director de la agencia, varón duro, machista, con un pasado sombrío. De su tambaleante matrimonio tiene una hija (Sofie) y un hijastro rubio de ojos celestes amante de Wagner (obviamente, producto de un soldado alemán durante la ocupación).
- Moulinier: el responsable por África, lidia con la catarata de independencias. Tiene mínimo cinco hijos no reconocidos allá y no se ocupaba de ellos porque “si quieren ser libres no pueden tener ataduras con Francia”. Lo mandan una vez a Berlín y casi causa la Tercera Guerra Mundial.
- Calot: Maneja Europa del este como un maestro. Ama el estilo de vida soviético al punto de preguntarse si no es un doble agente en unos episodios memorables en los que exige ser torturado ya que “podría ser el topo y no saberlo”. Tiene algún tornillo suelto, ya que a veces ve como si tuviera un gemelo.
- Jacquard: En la coyuntura histórica, quizá el más importante. Tiene Argelia, territorio que empieza a querer proclamar su libertad. Pero, a diferencia del resto del continente, Argelia es Francia. Su férrea voluntad antiemancipadora se debe, más que nada, a que tiene propiedades allí. Es, también, un recalcitrante machista.
- Marie-Jo: La mujer que quiere hacerse un lugar en la Agencia luego de que la otra femenina (Clayborn) se retirara al quedar embarazada con un bebé del Che Guevara. Tiene un gran compromiso con lo justo y pasa a ser la mano derecha de Moise. entabla una intensa relación con Merlaux para el final de la segunda temporada.
- Sophie: La sastre que confecciona los trajes de los agentes, desconociéndolo. Es el primer amor de Merlaux… pero todo se complica cuando se conoce que es la hija de Mercaillon.
Los actores son de primer nivel, no hay líneas apuradas ni gestos fuera de lugar. Estos pseudos James Bond quieren salvar a su querida patria de caer en la desgracia de ser segundona en el concierto mundial de la Guerra Fría.
Y no hay nada como ver a los responsables de los grandes cambios políticos del mundo en acción, siempre, al servicio de la Francia.
Eso sí, los jueves se corta para festejar.