Los primeros episodios de Better Call Saul 6 dejan un panorama muy sombrío para el final de la serie

El diablo está en los detalles fue una de las frases que usé para hablar del estreno de la sexta y última temporada de Better Call Saul que llegó a nosotros tan solo unas semanas atrás. Después de haberse presentado los primeros 7 episodios de este viaje final, una cosa ha quedado muy clara: la resolución se ve más oscura de lo que pensamos, y aunque sabemos el futuro de la historia, todavía hay mucho que resolver para llegar a ese punto.

La temporada final logra, por fin, hacer algo que Breaking Bad demostró desde su segunda entrega: construir un villano que nos hiciese temblar del miedo con cada paso que da. Así como Gus Fring fue importante para la historia de Walter White y Jesse Pinkman, ahora es Lalo Salamanca quien toma ese puesto, siendo un personaje sin límites, donde el sadismo es parte de su personalidad y a quien le hierve la sangre en cada momento, cosa que lo pone como un villano más letal de lo que alguna vez vimos ser al pollero.

Esta decisión sin duda es clave para el final de la serie, ya que tras el atentado en su contra Lalo se vuelve un fantasma en la vida de todos los que han estado involucrados con él: saben que murió, pero la realidad es que nadie está seguro de que eso sea cierto. Esto da paso para mostrar un ambiente frágil, en donde todo está en peligro y donde los actos de Jimmy y Kim pueden ser juego de niños en cuanto a lo que podría desatar Salamanca en cualquier momento.

Pero el caos y el constante temor de lo que terminará haciendo Lalo no es excluyente; las acciones de Jimmy y Kim también están construyendo la respuesta a una de las preguntas que tanto los hemos hecho desde el inicio: ¿qué va a pasar con ella? La transformación de Kim se ha completado, o mejor dicho, la revelación de su verdadera identidad ya se ha mostrado. Jimmy sigue sin entender el alcance de sus acto al lucir sonriente y poco preocupado ante cualquier situación, mientras que a Kim se le ve sin la sonrisa que la caracterizaba, como si fuese una mujer sin alma que está buscando sobrevivir. A través de esta lectura, los creadores nos advierten que ella podrá recibir el peor golpe dentro de la historia, como si se estuviese preparando para lo peor.

Prueba de lo anterior esto es el final de esta mitad de temporada, con el movimiento de la llama de la vela: Kim sabe que algo extraño está pasando mientras que Jimmy no se percata que su mayor problema no es el confrontamiento con Howard. Segundos después vemos la cara de sorpresa de Jimmy ante el regreso de Lalo Salamanca; a Kim también le toma por sorpresa, pero ella es más consciente de las acciones que puede tomar el nuevo enemigo que ambos ahora tienen en común y el problema en que los mete con ese último giro de tuerca.

Una vez más, Vince Gilligan y Peter Gould se divierten al presentar a Jimmy jugar con su conocimiento y hacer que la ley siempre esté de su lado sin medir las consecuencias de sus acciones. Pero por primera vez le hacen ver que sus acciones han escalado a un nivel mayúsculo, metiéndose con la gente equivocada con tal de salir del hoyo en el que años antes él se había sumergido y en el cual había permitido que los demás lo siguiesen hundiendo.

Aún con ello, todo parece indicar por la escena inicial de esta temporada que Jimmy pagará el alto precio por tener el dinero y el reconocimiento que siempre ha buscado, pero cuando esté en el punto más elevado, la caída será inevitable. La representación más clara es la particular tapa de una botella de alcohol que vemos en la acera, cuando las cosas de su casa están siendo registradas. La única vez que lo vemos dispuesto a comprar esa botella, el vendedor le dice lo cara que es y lo peligrosa que es debido a ese particular detalle de su tapa. Jimmy acepta las consecuencias diciendo estar consciente de ello sin saber que el peligro y lo filoso de ese tapón le costarán caro. Para mí una de las mejores analogías que nos presentó la serie en estos últimos episodios.

Better Call Saul, sexta temporada parte dos, vuelve el próximo martes 12 de Julio y sin duda existe un tono sombrío para cada uno de los personajes, nadie parece estar a salvo, y aunque muchos saldrán vivos, porque lo sabemos, las heridas que reciban en esta batalla final los definirán. No olvidemos que Gene, la personalidad que adoptó Jimmy/Saul tras lo sucesos de Breaking Bad, vive con mucho temor, lo cual seguramente será producto de lo que se vivirá en en el futuro.