El episodio comienza con una bellísima toma de Jimmy parado en una esquina con un traje blanco y un corbatín en forma de armadillo (como amamos la fotografía de esta serie!) En esa misma ubicación se detiene un colectivo lleno de ancianos que vienen directamente de Sandpiper el geriátrico que el había aportado a la firma de abogados para que inicie una acción de clase o colectiva.
Con todos sus artilugios Jimmy se acerca a una de las ancianas y, sin intención aparente, comienza a hablarle sobre la estafa de sobrefacturación. Resultado de la interveción: veinticuatro ancianos firmaron con el estudio para que defienda sus derechos.
En la siguiente reunión de directorio del buffet de abogados presenta su terrible desempeño como relacionista público, pero es interpelado por su propio hermano quien lo acusa de incitar a la contratación, algo que dentro de la ética profesional no está permitido.
Kim se preocupa por esta situación y es entonces cuando Jimmy decide hacer algo más extremo: filmar un comercial que los ancianos puedan ver en la televisión dado que sospecha que el correo sea interferido por los responsables del nosocomio.
Con dos estudiantes de cine y una anciana realizan el mismo (gran frase el episodio “I m ready for my closeup Mr Mc Gill).