Esta serie de terror pasó sin pena ni gloria por Netflix
El 26 de Abril llegó a Netflix una nueva serie de terror creada por Leah Rachel. ¿Su título? Chambers. Lo que entusiasmó mucho fue el hecho que dentro de su elenco teníamos a la gran Uma Thurman. Pero, ¿eso sirvió?
Debemos reconocer que el tráiler fue mucho más impactante que en la serie en sí, la misma que, si bien tiene algunos errores, es un buen pasatiempo, se puede disfrutar. La clave es ser paciente ya que los primeros episodios son narrativamente lentos, pero luego poco a poco la trama cautiva.
Chambers está protagonizada por Sivan Alyra Rose quien interpreta a Sasha Yazzie, una joven que está decidida a perder su virginidad y la noche que está por hacerlo sufre un ataque al corazón por lo cual obtiene un trasplante.
Tenemos a Marcus LaVoi como Frank Yazzie, el tío de Sasha, quien más reniega sobre el hecho de que haya algo paranormal en los sucesos que atraviesa su sobrina; él confía que es algo psicológico y se mete en problemas para conseguir el dinero para su tratamiento.
Nicholas Galitzine interpreta a Elliott Lefevre, el hermano de Becky; decide ayudar a Sasha a entender que pasó con su hermana. Kyanna Simone Simpson es Yvonne Perkins, la mejor amiga de Sasha; logra traerla de vuelta cuando esté “perdida dentro” de Becky. Griffin Powell-Arcand es TJ Locklear, el novio de Sasha; junto a Yvonne serán los encargados de salvarla.
Luego está Lily Kay como Penélope Fowler, quien sospechosamente siempre está en medio de todo y es una de las que tiene jerarquía dentro de Fundación Anexo. Tony Goldwyn es Ben Lefevre, padre de Becky; está completamente comprometido con la Fundación Anexo y es parte de lo que su hija tuvo que atravesar antes de morir.
La gran Uma Thurman es Nancy Lefebvre, madre de Becky; intenta poco a poco entender qué sucedió con su hija, cosa que la pone en riesgo. Por último, Liliya Scarlett Reid es Becky, a quien conocemos gracias a Sasha y su extraña conexión.
La serie se divide en partes o argumentos. Por un lado, el comienzo de todo es el trasplante de corazón que recibe Sasha Yazzie y cómo a partir de ese momento su vida comienza a cambiar. Por otro lado, son importantes los eventos que fueron sucediendo la noche del trasplante ya que esa no fue una noche típica: hubo 58 nacimientos y una gran tormenta además de lo que le ocurrió a Becky, la donante. Se deben destacar también los sucesos que atraviesa Sasha a partir del trasplante ya que su vida cambia por completo. Los Lefevre quieren incluirla en su círculo al llevar el corazón de su hija, y es por eso que le brindan una beca y bastante ayuda económica. Y ahí el click: Sasha comienza a sentir todo lo que sentía Becky. Es así que resolver la muerte de la donante es algo que la obsesiona y que poco a poco la haga transformarse en ella, llegando finalmente a obtener una gran verdad.
En paralelo tenemos también una Fundación llamada a Anexo de la que los padres de Becky (y gran parte de su entorno) forman parte. Anexo será lo que una, de cierta manera, la historia, ya que está detrás de todo: al final de la temporada podemos entender cómo la Fundación Anexo mueve los hilos y Ben Lefevre fue quien entregó a su hija, porque Becky fue utilizada en un ritual donde fue lastimada y violada. Luego de esto todo empezó a cambiar y el mal comenzó a crecer en ella y también las tendencias suicidas, causa de su fallecimiento. Traspasando su actitud al cuerpo de Sasha, la trasplantada no vence al mal, digamos, pero entiende lo sucedido y logra también la autonomía sobre su cuerpo y su mente.
El guión nos recuerda mucho a otras producciones del género como Stir of Echoes (1999) o Gothika (2003) donde los espíritus se hacían presentes para resolver lo traumático que había sido su muerte. Claro, no es del todo original, pero sí hay que buscar su cuidado en cuanto a simbología: a lo largo de los 10 episodios veremos todo tipo de símbolos, no solo los ligados a la Fundación Anexo sino también a los propios de la tribu a la que pertenece Sasha; detrás del trasplante había algo mayor, el invocar una gran fuerza oscura.
La producción se destaca a nivel visual por su fotografía y varias de sus actuaciones. Sin dudas, Uma Thurman es la más destacada. La falla de Chambers es el ritmo en la narración para todos los tópicos que intenta mostrar: comienza, como dijimos en nuestra introducción, de una forma muy lenta, pero si tienes paciencia, poco a poco te envuelve en su trama con un final que es impactante (vale notar que el cierre también puede ser que les rememore a otra película del género como es Hereditary de 2018).
Si bien no sabemos si Chambers será renovada, y reconocemos que no es una de las mejores producciones de Netflix, es una historia que puede disfrutarse.