Nuestro querido Tobey Maguire cumplió 46 años este 27 de Junio y lo festejamos revisitando sus mejores momentos como Peter Parker. Esperamos verlo de vuelta en Spider-Man: No Way Home.
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Nuestro querido Tobey Maguire cumplió 46 años este 27 de Junio y lo festejamos revisitando sus mejores momentos como Peter Parker. Esperamos verlo de vuelta en Spider-Man: No Way Home.
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En el final de Spider-Man 3, cuando Peter queda cara a cara con Sandman, el hombre que en realidad disparó y mató a su tío Ben hace todos esos años, deja a un lado su odio y su rabia vengativa y lo perdona.
Peter escucha la historia de su enemigo y lo absuelve de sus pecados. Arrepentido de sus acciones, Sandman se convierte en polvo y se va volando, abandonando sus caminos criminales para siempre. Si a esto le sumamos la muerte de Harry, se vuelve un final bastante emocionante para una película que venía cometiendo varios errores.
Durante la batalla final con el Doctor Octopus, Peter debe recurrir a sacarse la máscara para resolver su conflicto con Ock y salvar a la ciudad. Es la única manera que su antiguo mentor lo escuche.
El impacto de descubrir que Spider-Man y Peter Parker son la misma persona es suficiente para convencer a Octavius de que su búsqueda de la gloria solo puede terminar en muerte y destrucción, y finalmente se sacrifica para expiar sus pecados. Es el final perfecto para la mejor película de Spidey hasta el momento.
Después de despachar sin esfuerzo a un par de criminales que la perseguían, MJ se encuentra con Spidey para una pequeña charla que termina derivando en uno de los besos más memorables del cine en los últimos años.
La escena ganó el premio MTV Movie Award al Mejor Beso, y luego fue homenajeada en Spider-Man 3, donde Peter Parker, borracho de adoración pública, permite a Gwen Stacy besarlo durante un evento público. MJ no aprecia el gesto, por decir lo menos.
La pelea final entre Spider-Man y Green Goblin tiene un tono completamente diferente al del resto de la película. La escena no tiene música y cada golpe cobra un significado diferente. Es una batalla despiadada y conmovedora.
Después de que Goblin explote una bomba en su cara y amenace con matar a Mary Jane lenta y dolorosamente, Peter derriba una pared sobre su cabeza. Al final, Osborn intenta matarlo con su planeador, pero Parker se aparta del camino en el último momento y Norman termina suicidándose.
Este es el momento más grande en la historia de Spider-Man en el cine. Peter lucha con el Doctor Octopus de manera espectacular, y luego tiene que evitar que un tren fuera de control destruya la ciudad, en una escena llena de tensión y acción.
Doc Ock agarra a dos pasajeros y los arroja del tren, pero Peter los atrapa y los arroja en redes construidas apresuradamente. Luego, Otto desactiva los frenos y Spidey tiene que usar cada gramo de su fuerza para detener el vehículo fuera de control, lo cual le cuesta toda su energía y se derrumba sin máscara entre la gente, haciendo que los ciudadanos intenten protegerlo del villano.
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