Esta semana se estrenó en cines Dont’ Breathe 2 (No Respires 2), secuela de la exitosa cinta de 2016 que consolidó al uruguayo Fede Álvarez como un efectivo director de cintas de terror apadrinado por Sam Raimi. Ahora, su compatriota Rodo Sayagues debuta en la silla del director para continuar con la historia que fue un éxito en taquilla y con la crítica especializada.
La historia nos lleva 8 años después de los eventos de la primera, cuando ahora el ciego Norman Nordstrom (Stephen Lang) vive con su perro Shadow y con una niña de 11 años, Phoenix (Madelyn Grace), a quien acogió después de que un incendio mató a su madre.
Phoenix vive la mayor parte del tiempo encerrada, sometida a la dura disciplina del ciego, quien la mantiene aislada de la sociedad mientras la educa en los temas normales, pero también enseñándole a sobrevivir y defenderse de la gente mala.
Norman, Phoenix y Shadow sobreviven vendiendo plantas de su invernadero a través de una florista local quien ha entablado una gran conexión con Phoenix. Ella insiste en llevarla al pueblo, pero en uno de esos viajes la niña atrae a una banda de maleantes que planean secuestrarla.
Este grupo de 5 violentos y sangrientos bandidos invadirá la casa de Norman sin saber que desatarán al hombre que había tratado de ocultar durante años. Sin embargo, estos hombres no dejarán que nada se interponga en su camino y serán capaces de todo con tal de llevarse a la pequeña.
Una de las razones que motivó a Fede Alvarez a producir la historia original era hacer una cinta de terror como las de antaño, una historia de terror basada en el suspenso en lugar de elementos sobrenaturales o masacres sin sentido. Esta idea continúa en No Respires 2.
Aunque sí hay sangre y momentos gore, la idea es similar a la original: una película “home invasion” invertida en la que Alvarez y Sayagues vuelven a los géneros de antaño pero en esta ocasión le agregan más profundidad al personaje del ciego, además de que logran construir secuencias llenas de suspenso con giros de tuerca que funcionan perfectamente. La inclusión de la niña en medio de toda la barbarie le brinda a la cinta el corazón necesario para tener momentos emotivos que completan el cuadro.
No Respires 2, sigue manteniendo el espíritu de bajo presupuesto de la original, centrándose prácticamente en una sola locación y en el enfrentamiento del ciego contra el grupo de maleantes. Aunque es el debut de Sayagues como director, logra entregarnos secuencias con un uso muy creativo de la cámara, dándole a la cinta un aire de frescura que contrasta con el tono clásico que se quiere lograr.
La combinación con la excelente fotografía del también uruguayo Pedro Luque logra aprovechar los claroscuros del escenario para volverlo parte de la narrativa y del suspenso de la cinta. Para completar el cuadro, la excelente música de suspenso del español y últimamente muy ocupado Roque Baños logra aumentar el grado de suspenso ya que, al igual que la primera parte, No Respires 2 economiza en diálogos, pero gracias a toda la suma de estos elementos todo funciona perfectamente.
Pero...
Aunque esta secuela no está lejos de la original, no logra tener la intensidad de la primera. La inclusión de mayor profundidad en los personajes le resta un poco de brutalidad.
Para el espectador ocasional la cinta parecerá una copia a calca de la original, y aunque sí hay partes que se repiten en ambas, la cinta tiene los giros de tuerca suficientes para sorprender al público que le dé una oportunidad.
En resumen
Dont’ Breathe 2 (No Respires 2) es una efectiva cinta de terror y suspenso con buenos toques de gore. Fede Alvarez y Royo Sayagues logran entregarnos una secuela digna de la original, que retoma lo mejor de esa entrega y le agrega elementos emotivos y hasta tiernos que funcionan gracias a la efectiva actuación del gran Stephen Lang.
Sayagues continúa la escuela de terror que Sam Raimi está construyendo y que promete entregarnos más películas de terror que evoquen las de antaño pero que al mismo tiempo refresquen la pantalla.