Hoy 22 de noviembre cumple 25 años la primera entrega de la saga de Toy Story, pero después de todos estos años nos queda la pregunta: ¿cuál es la mejor película de la saga? Acá te lo respondemos.
Hoy 22 de noviembre cumple 25 años la primera entrega de la saga de Toy Story, pero después de todos estos años nos queda la pregunta: ¿cuál es la mejor película de la saga? Acá te lo respondemos.
Hasta 2019, este iba a ser el final de la saga y ciertamente tuvo muchos momentos emocionantes que la convirtieron en una película digna para finalizar la franquicia, pero sufre cuando la comparamos con el resto de las historias.
Lotso es un buen villano, pero no termina de convencer y se incorporan tantos personajes que muchos se terminan perdiendo dentro de la trama. La última escena, sin embargo, es completamente fantástica.
Forky, un invento infantil que se convierte en juguete, es una adquisición genial y de inmediato se distingue del resto de los personajes, ya que hasta este momento sólo habíamos visto a juguetes más clásicos, dejando de lado a los marginales que muchos también amamos.
La experiencia de Forky desafía todas las nociones que Woody había establecido luego de las tres películas anteriores y profundiza en esta crisis de existencialista que recorre a cada una de las cintas. Además, Gabby Gabby demostró ser una villana convincente.
La primera secuela de Toy Story no pudo superar a la película original, pero es correcto decir que se acercó bastante. La escena de cuando arreglan a Woody todavía la tenemos en nuestra mente y tanto Al como Stinky Pete son muy buenos villanos. El primero quizás sea el segundo mejor de la franquicia.
Conserva las aventuras divertidas, las maravillosas acotaciones de los personajes secundarios y también profundiza en las problemáticas de la vida de los juguetes. Jesse y Tiro al Blanco son incorporaciones fascinantes.
Pixar tiene una inmensa cantidad de películas impresionantes, pero muy pocas son tan perfectas como Toy Story. Sin dudas entra en el podio del estudio y bien podría ocupar el primer puesto.
Si eres chico, es imposible que no te sientas representado por Andy e incluso podrías ver en Woody y Buzz a algunos de tus juguetes. Si eres más grande, podrás disfrutar de lo bien desarrollada que está la personalidad de cada personaje, la maravillosa animación y cómo los escritores juegan con los diferentes géneros (terror, suspenso, drama, acción), pero sin salirse del ambiente familiar que requiere Disney.
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