¡Arrancamos este año a todo ostias tíos! Momento… Sí, hablo en español de la Península Ibérica. ¿Por qué? Simple: una nueva serie española se las trae; una comedia pero con una base del típico thriller policial al mejor estilo Fargo. Es más, me atrevo que encajaría muy bien en ese universo ya que cuenta con muchas de sus características: mafia, 2 matones, un perdedor y una ola de sucesos inimaginables que lo harán echar todo a perder… Con ustedes, Matadero.
La historia transcurre en un pueblo pequeño de Castilla famoso por la venta de cerdos, donde nos encontramos con uno de los protagonistas, Alfonso (Pepe Viyuela), un veterinario, el famoso loser de la historia, que a su vez es cuñado de Francisco (Antonio Garrido), un mujeriego y ambicioso dueño de un matadero. Este último tiene relaciones muy estrechas con portugueses al negociar con cerdos que se vuelven blancos y de polvo: el negocio en sí es el tráfico de cocaína dentro de los animales.
No faltara mucho para que el hilo conductor nos muestre a los 2 matones Teo (Miguel de Lira) y Pacual (Ginés García Millán) los cuales responden a Don Julio (José Ángel Egido), jefe de un pequeño clan de narcotraficantes de la Ría de Arosa. Don Julio, al enterarse que tiene competencia, no dudará en sacárselos de encima… COMO SEA.
Al elenco se suman: Da Silva (Gonzalo Uriarte) perteneciente al clan de la mafia portuaria de Oporto, socio-jefe de Francisco; la familia de Alfonso compuesta por su mujer María José (Carmen Ruiz) y su cuñada y esposa de Francisco, Almudena (Lucía Quintana); por último, Tito Valverde interpretando a Salvador, dueño del otro matadero de la zona, por lo cual es enemigo de Francisco.
Todos estos personajes, y más, dan rienda suelta a la locura en esta divertida y apasionante serie. Últimamente los españoles nos tienen de parabienes, y Matadero no defrauda.
Esperemos que próximamente Netflix adquiera los derechos para que su masividad sea real. Se lo merece.
