Hoy 21 de noviembre, la televisión cumple 90 años y muchas cosas cambiaron desde sus orígenes… ¡Fue una tremenda evolución! 🙂
La tecnología que formaría la base para las televisiones de hoy se demostró por primera vez en 1927. Por difícil que sea creer que la televisión ya tiene 9 décadas, sus orígenes son aún más notables.
El primer televisor totalmente electrónico fue construido en 1927 por Philo Taylor Farnsworth, un inventor estadounidense interesado en la posibilidad de un sistema electrónico que uniese las características de la radio y el cine, transmitiendo en simultáneo imagen y sonido. Algunos inventores como George Carey, W. E. Sawyer, Maurice Leblanc y Paul Nipkow ya habían trabajado en ese campo, aunque con escaso éxito. Pero Farnsworth descubrió que esos sistemas de televisión mecánica no funcionarían lo bastante rápido para captar una imagen nítida.
Farnsworth descubrió en ese tiempo una nueva partícula, el electrón, y encontró la solución para transformar la luz en electricidad. Un día, trabajando con una cosechadora de la granja de su familia, se le ocurrió que un haz de electrones desviado magnéticamente para que operase línea por línea, como hacía la cosechadora, podía soportar la imagen de un modo parecido al que trabajan los ojos al leer un libro. En aquel momento tenía 14 años y, junto con su profesor de química, Justin Tolman, desarrolló en seis meses los aspectos teóricos de su idea.