Ya pasaron varios días desde el estreno de No Time to Die, la reciente película de la saga James Bond 007 y definitivamente la última estelarizada por Daniel Craig.
Así que, si para este momento no la han visto pero están leyendo estas líneas, sepan que se encuentran en trayectoria directa al tremendo SPOILER DE SU FINAL.
Lo cierto es que, nos haya gustado o no el giro sorpresivo y conclusión de Sin tiempo para morir, es un hecho que hay opiniones polarizadas entre miles de fans de James Bond alrededor del mundo. ¿Por qué tenía que morir? ¿Marca eso algo totalmente inédito para la siguiente película (al final de los créditos se asegura que “James Bond volverá”), siendo que esto jamás había sucedido en la franquicia?
Una vez que Bond se da cuenta de que la infección nanogenética sufrida a manos de Safin en su confrontación final impedirá que se acerque de forma alguna al amor de su vida y su hija –puesto que podría asesinarlas–, James decide sacrificarse en favor de la destrucción de la “isla venenosa”, cuando era claro que podría haber escapado a su estilo: de forma milagrosa y espectacular.
“Jamás hubo duda sobre eso“, aseguraron los editores Elliot Graham y Tom Cross a IndieWire. Ambos concordaron en que para la producción y el director Cary Joji Fukunaga el desenlace era algo muy claro desde que se sabía que Daniel Craig se retiraba de la franquicia.
Es decir, que se consideró mover el orden de algunos elementos de la historia (curiosamente incluyendo la secuencia previa a los créditos iniciales), pero jamás se pensó en “dos o varios finales” para dejar al público con la esperanza de que, al menos en uno de ellos Bond sobreviviera.
Si las teorías sobre “el nombre se mantiene pero el rostro cambia” de muchos fans son ciertas, sencillamente veremos otro actor con el nombre y el número. Borrón y cuenta nueva.
¿Es esto lo que merece el personaje? ¿Consideran que la saga debería terminar así? Si se tratara de whovians y Doctor Who, al menos se sabe desde hace casi 60 años que el protagonista cambia de rostro, pero en este caso, pese a los diferentes actores que han encarnado a Bond, es difícil de asimilar que en la película No. 25 el espía británico finalmente muere. ¡Eso sí, de qué forma!
Pueden ver y despedir a Craig y su Bond en salas de cine aún, pues No Time to Die sigue en cartelera.
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