Intercambiar cuerpos se vuelve peligrosamente divertido, pero…

Blumhouse Productions se ha convertido de una de las grandes partícipes de la industria hollywoodense en la última década, pues no solamente ha sido reconocida dentro de los Premios de la Academia por producir films como Whiplash (2014), Get Out (2017) y BlacKkKlansman (2018), sino que además tiene el distintivo de que produce películas de terror a bajo coste y de las cuales encontramos Paranormal Activity, Insidious, The Purge, Sinister, Split, entre muchas otras más. Y justamente dentro de este apartado, el propio Jason Blum, fundador de la casa productora, ha trabajado de la mano con el cineasta Christopher Landon, pues ambos llevaron a la pantalla grande las secuelas de Paranormal Activity o las divertidas cintas de horror, Happy Death Day y Happy Death Day 2U, por lo que ya se conocen a la perfección, y deciden en este 2020 traer a la vida Freaky (Freaky: Este cuerpo está para matar), una divertida mezcla entre el horror y la comedia que llega para aligerar la cuarentena.

Esta cinta es una reinvención/homenaje de la historia contada en Freaky Friday (2003), cinta protagonizada por Jaime Lee Curtis y Lindsay Lohan, en la que madre e hija intercambian su cuerpo para empatizar y conocer lo que vive cada una en su día a día, solo que en esta ocasión quienes intercambian su cuerpo son un asesino en serie (Vince Vaughn) y una joven y muy tímida estudiante (Kathryn Newton), quien descubre que tiene menos de 24 horas para evitar que el cambio sea permanente. El resto del reparto lo complementan Alan Ruck, Uriah Shelton, Katie Finneran y Dustin Lewis.

De los principales aciertos dentro de la película es la elección de sus dos protagonistas, quienes disfrutan y le permiten al espectador disfrutar de lo que acontece en pantalla. Ambos se sienten en plena comodidad y se dejan llevar por la ficción contada, cada uno agregando detalles particulares a sus personajes, volviéndose algo único, divertido y entrañable, por lo que cualquier situación que ocurra se tornará una delicia para el espectador. Y es que Freaky permite que disfrutemos como una persona de casi 2 metros tiene que encajar en el cuerpo de una joven de apenas 1.65 metros, o caso contrario, la chica tímida del colegio, se encuentra en el cuerpo fuerte de un asesino serial, regalando momentos de plena diversión. Mención aparte para un beso que ocurre hacia el final de Freaky, lo que hace que el boleto de entrada valga totalmente la pena.

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Además, el hecho de que el guion sea tan simple y cero pretencioso permite que quien se siente en una butaca para ver la cinta lo haga de la manera más sencilla y amena posible. Como coloquialmente se suele decir, Freaky se torna en una producción para echar palomitas y refrescos, pues incita a que te dejes llevar por su historia y no busques mayor explicación en su devenir. Christopher Landon encuentra la fórmula idónea para balancear el subgénero slasher con la comedia, algo que ya había tocado de primera mano con sus pasadas entregas de Happy Death Day, pero ahora le añade el toque central del intercambio de cuerpos, por lo que encontramos momentos de alta tensión y desesperación que a los pocos segundos se vuelven en una carcajada bien equilibrada. Todos en la sala de cine podrán estar totalmente relajados sabiendo que no van a salir con paranoia.

Los homenajes a los grandes slasher como Halloween, Scream, Friday the 13th y a maestros del género del terror como Wes Craven, David Cronenberg y John Carpenter están latentes desde el comienzo de la cinta hasta su final, con referencias en los asesinatos que comete el violento personaje de Vince Vaughn, hasta con guiños especiales dentro de cámara que más de un atento espectador podrá encontrar. Y no resulta extraño, pues el propio Landon ha dicho en reiteradas ocasiones que su inspiración reside en los cineastas antes mencionados, así como todas las cintas de horror que miró durante su infancia y adolescencia.

No hay peros. Freaky es una muy divertida apuesta por parte de Blumhouse Productions, para que las personas retornen a las salas de cine en esta contingencia global.

Freaky le brinda al espectador los elementos necesarios para pasar un rato ameno y repunta al encontrar a dos grandes protagonistas que sostienen de gran manera la desquiciada historia del director Christopher Landon.