Hello Kitty: La gata más famosa aterriza en Netflix
Un vistazo a la historia de los juguetes de la marca japonesa.
La segunda temporada de The Toys That Made Us llegó a Netflix para seguir revelando la historia detrás de los juguetes de las franquicias más importantes de todos los tiempos. Acompañada de diversas entrevistas y con su peculiar tono humorístico, la serie documental nos lleva de paseo por el fabuloso universo de estas figuras amadas por grandes y chicos.
Y si hablamos de juguetes famosos, no podíamos dejar de lado a aquel tierno personaje creado por la compañía japonesa Sanrio en 1974. Hello Kitty no solo es una de las marcas más vendidas en todo el planeta, sino que también ha sido la piedra fundacional del estilo Kawaii.
Te invitamos a recorrer parte de la biografía de este fenómeno cultural que sigue marcando tendencia.
Kitty nunca fue una gata
Sí, a pesar de que para nosotros, los nostálgicos, siempre será la gatita del lazo rojo, lo cierto es que el personaje de Kitty es en realidad una niña y de nacionalidad británica.
Hello Kitty fue diseñada por la ilustradora Yuko Shimizu, quien desde un primer momento tuvo en claro que se trataba de un ser humano con apariencia felina. De hecho, la propia Kitty tiene un gato blanco como mascota llamado Charmmy Kitty. Ella es una pequeña niña estudiante de tercer grado que camina, actúa y habla como toda persona.
El nombre real del personaje es Kitty White, hija de George y Mary White, y hermana gemela de Mimmy. Como hemos mencionado, esta insólita niña amante de las tartas de manzana y la música clásica no es japonesa sino británica y esto también tiene su explicación. Yuko confesó que en la década de los ‘70, todas las adolescentes asiáticas estaban fascinadas por la cultura de Reino Unido y por ello decidió darle a Kitty un origen europeo. Y a decir verdad, su estilo de vida de clase alta poco tiene que ver con las costumbres japonesas.
"Regalo pequeño, sonrisa grande"
La empresa que hoy recauda miles de millones de dólares gracias a los innumerables juguetes y accesorios de la marca Hello Kitty le debe todo a un simple monedero de plástico.
El CEO de Sanrio, Shintaro Tsuji (luego conocido como Papá Tsuji) tenía un lema para sus productos: “Regalo pequeño, sonrisa grande”. Así fue como el primer accesorio de Hello Kitty en salir al mercado fue este adorable monedero que solían usar tanto las niñas y adolescentes como sus madres.
El problema ocurrió cuando el personaje llegó a Estados Unidos en los ‘70, época en la que aún no estaban acostumbrados a los diminutos juguetes japoneses y toda la cultura pop oriental. Kitty tampoco era muy conocida por aquel entonces, por lo cual terminaba siendo desplazado por los clásicos peluches de Disney y Plaza Sésamo.
La verdadera madre de Hello Kitty
Hello Kitty había fracasado en su primer intento de hacerse popular en Occidente y ante la amenaza del quiebre, la compañía de Papá Tsuji comenzó a apostar por otros personajes como el conejo My Melody.
Todo cambió cuando la diseñadora Yuko Yamaguchi llegó a Sanrio dispuesta a revivir a la icónica figura.Yuko advirtió enseguida que mucho de los recursos de Kitty no estaban siendo utilizados. Su afición a la música era uno de ellos y por eso empezó a ilustrar caricaturas de la niña tocando el piano y otros instrumentos. También creyó que a las adolescentes les gustaría verla vestida de otras formas que no fuera su clásico jardinerito azul y por ello diseñó diversos modelos y estilos de ropa.
El gran desafío de Yuko vendría cuando la empresa le propondría trabajar en la primera serie de animación de Kitty. Puesto que la niña no posee boca, o al menos eso es lo que se creía, muchos afirmaban que sería imposible adaptarla al formato audiovisual. Sin embargo, la diseñadora explicó que por más que Kitty fuera retratada sin boca, eso no quería decir que no la tuviera.
Finalmente, el dibujo animado fue lanzado y los fans escucharon por primera vez la voz de su amado personaje.
El boom de Kitty
La primera tienda exclusiva de productos Sanrio que se lanzó en los Estados Unidos resultó ser todo un éxito. Kitty era la favorita de todas las niñas que iban allí y, para alegría de los padres, también la linea más económica.
Peluches, muñecos, mochilas, walkie- talkies, juegos de té, autos, motos, cámaras, pianos…absolutamente todo lo que puedan imaginar lleva la marca de Kitty.
Los fanáticos de Hello Kitty suelen ser también obsesivos por conseguir hasta los objetos más extravagantes con la cara del personaje. Actualmente, el japonés Masao Gunji se encuentra en el libro de los récords Guinness por ser poseedor de más de 5 mil artículos de la amada Kitty.
El estilo Kawaii-que en Japón significaba algo así como “adorable”- actualmente se encuentra en todos los rincones del mundo y por supuesto, Kitty es su máximo estandarte.
Diversas figuras de la escena pop también se han encargado de popularizar la marca por ímpetu propio, haciendo que Kitty ni siquiera necesite del marketing. Paris Hilton, Lady Gaga y Avril Lavinge, quien también hizo un tema y un videoclip bautizado Hello Kitty, son fanáticas del personaje.
