Tengo un tema con el cine mexicano. Probablemente este se repite en muchos de los que están leyendo este texto: por un lado, me entretienen sus comedias hilarantes como Sobreviviendo mis XV de Chava Cartas (2023) y Cindy la Regia (2020); por otro lado, me gustan sus historias autorales, esos testimonios premonitorios y otros fehacientes de una realidad dolorosa, sangrante. Por eso, Heroico de David Zonana.
¿De qué trata? Luis, un joven de 18 años, decide entrar al ejército para mejorar el nivel de vida de su familia además de obtener el seguro militar para cubrir los gastos que la enfermedad de su madre absorbe cada día. Dentro de la escuela militar, es testigo del abuso, de parte de superiores, a algunos de sus compañeros, lo que desata una ola de violencia y desapariciones dentro de la academia.
David Zonana es de esos directores que hoy puede dirigir una película, pero mañana puede que escriba una novela. Él mismo lo dijo. Heroico es una historia sobre muchas cosas que sabemos que pasan dentro de muchas de las caras que tiene la maldad, sobre lo que le da forma al poder. La pluma de David Zonana es punzante, incisiva e incómoda cuando se trata de contar crudeza y oscuridad humana. Porque, aunque la historia esté enmarcada con un México herido y violento, esto puede suceder o, mejor dicho, pasa en cualquier país. Con Luis, su personaje principal, crea a un testigo que no es foco de las vejaciones y violencia de su entorno, sino que funciona como un hilo conductor que representa al espectador dentro de este viaje oscuro lleno de humillaciones, corrupción, muerte y sangre.
Lo anterior me lleva a respuestas para historias, igual de crudas, como Rojo Amanecer de Jorge Fons (1989) o ficciones distópicas (o no tanto) como Nuevo Orden de Michel Franco (2020) y la ya no tan imaginaria violencia y frialdad del ejército no solo al ejecutar órdenes, sino también por entretenerse a sí mismos. En su momento, al mirar esas imágenes de esas películas, me impactaba la forma en cómo ese elemento de seguridad se podría volver contra nosotros en cualquier momento.
Las imágenes que crea David Zonana en Heroico son más efectivas que cualquier película de terror mexicana que se haya estrenado este año. Sus atmósferas y complicaciones psicológicas tan humanas sumergen al espectador ante un espiral de violencia tan surreal que puede parecer una paradoja que se muerde la cola en un ciclo muy cercano a la realidad.
Con Heroico, David Zonana explora, en la superficie, un nivel de violencia extrema disfrazada de disciplina y patriotismo absurdo. De pensar que esto es solo lo que podemos imaginar al ser rebasados por la realidad, me da escalofríos.
Ya en cines.
