Hulu nos regala este reboot de la gran película High Fidelity. Basada en la novela romántica homónima escrita por Nick Hornby y protagonizada por la admirable Zoë Kravitz, la serie cuenta con 10 capítulos en un formato de 30 a 35 minutos.
Rob, que ahora es interpretado por una chica destruida sentimentalmente al ser abandonada por su novio, pierde el rumbo y busca congeniar en una nueva relación mientras conoce a distintos chicos y, claro, toma decisiones equivocadas sobre el amor.
No se puede sentir compasión por Rob ya que es una chica muy aislada y a su vez egoísta que busca solo su beneficio por encima de cualquier chico e inclusive de sus amistades. Con esto confirmamos que la serie mantiene el mismo ritmo de la adaptación que ya conocemos.

La historia se traslada a Brooklyn, un escenario perfecto para una historia de amor. En cada episodio se nos trae el pasado y presente de nuestra Rob y sus amigos Cherise (Da’Vine Joy Randolph) y Simon (David H. Holmes), empleados ambos de la tienda de vinilos: Cherise una chica dispuesta a sobresalir y qué está en busca de una banda, mientras que nuestro Simon esta en el top 5 de la lista de Rob, pero al darse cuenta que también le gustan los chicos termina como uno de sus mejores amigos.

A lo largo de la temporada Rob intenta buscar el porqué la abandonaron, mientras que su príncipe, Russell McCormack, mejor conocido como Mac, regresa después de un año en Londres y de casualidad se topa con Rob en una secuencia emotiva. Pero claro está que no todo puede ser bueno: Mac vuelve comprometido con Lily y se complica. Pero, ¡donde hubo fuego cenizas quedan!

La música y la cultura pop son importantes a lo largo de los episodios: desde Kanye West, pasando por Otis Brown y la fenomenal Ann Peebles e incluso Blondie son por mencionar algunos que debemos enlistar en nuestra nueva playlist (aquí te la dejamos la lista de spotify 🙂 ) ya que High Fidelity logra hacerte pensar “qué buena canción estoy escuchando” con ganas de buscarla de inmediato.
Si bien su coleccionismo algo exagerado satura en la pantalla, agrada tanto que es una opción divertida y audaz hoy día.

Con Zoë a la cabeza, y aunque el arranque es un poco lento, pasando el segundo capítulo High Fidelity toma un excelente rumbo. Y aunque quedan dudas abiertas, como qué pasara con el trío amoroso entre Clyde, Rob y Mac, la serie cierra de manera exquisita.
Ok, existen muchas similitudes con la anterior adaptación, pero todos los personajes han sido escogidos de manera correcta, haciéndola casi perfecta.
Dale una oportunidad, no te va a decepcionar.