James Wan con Maligno divierte, asusta y sorprende pero…
Con #Malignant (#Maligno) James Wan quería hacer una película de terror que fuera diferente en su planteamiento. ¿Lo logró?
James Wan es uno de los directores más prolíficos en cuanto al terror se refiere. Nos ha traído clásicos del género como Saw (2004), la saga de El Conjuro, Insidious, etc. Incluso ha incursionado en el mundo de los superhéroes con Aquaman. A pesar de que ha producido más de 30 películas, ha dirigido solo algunas; por eso es que el estreno de Malignant (Maligno) ha generado tanta expectativa en los fans del género.
Envuelta en un halo de misterio desde su concepción, la cinta no fue presentada a la prensa en los screenings habituales, no hay muchas notas acerca de la sinopsis, ni cuenta con grandes actores en el reparto. Es más, el mismo Wan pide a los espectadores que no revelen ningún secreto de la cinta.
La historia se centra en Madison (Anabelle Wallis), una joven que es atormentada por las visiones de los asesinatos cometidos por Gabriel, su amigo imaginario de la infancia que ha regresado a su vida pero en forma de asesino serial.
Madison, junto son su hermana Sidney (Maddie Hasson) y los investigadores de la policía Kekoa (George Young) y Regina (Michole Briana White), tendrán que rastrear el origen de Gabriel (también apodado El Diablo) por todo Seattle antes de que siga con su sendero de muerte y destrucción.
James Wan reveló en los tráilers y en entrevistas previas que quería hacer algo diferente, que no fuera repetir una y otra vez la premisa de todas las cintas de terror. Y cumple.
La forma en que está estructurada la película nos lleva por varios momentos típicos de todas las películas de terror; incluso es un claro homenaje a los slashers de la década de 1990 donde un asesino anda suelto mientras los héroes tratan de entenderlo para poder detenerlo: Shocker, Candyman, y un largo etcétera vienen a la mente. John Carpenter estará orgulloso.
Cuando este catálogo de momentos del cine de terror que parecen disconexos y que están llenos de comedia negra (típica de Wan) parece que está por sucumbir porque no son tomados para nada en serio, la cinta da un genial salto a un tercer acto que se convierte en lo más divertido, gore, irreal y dantesco que hemos visto en este género en los últimos años.
James Wan cumple con su promesa y regresa a las andadas en una película que mantuvo en bajo perfil lo suficiente para sorprender aún más.
Pero...
Tal vez el armado de la cinta, las múltiples referencias/homenajes al cine de terror clásico y lo confuso de la primera mitad desanimen a los iniciados en el cine de terror. Los jump-scares del principio también podrán parecer obvios, pero gracias al colmillo largo y retorcido que Wan ha desarrollado se entiende que estén puestos minuciosamente.
Lo que afectará notablemente el disfrute de la cinta es que saldrá el 10 de Septiembre en HBO Max en Estados Unidos y eso ocasionará una avalancha de comentarios en redes que arruinará la sorpresa.
En resumen
James Wan quería hacer una película de terror que fuera diferente en su planteamiento; que no represente la misma historia que vemos cada X tiempo en el cine. Con Malignant (Maligno) lo logró. Ha creado una historia de terror que sorprende.
Este es un claro homenaje al cine clásico de slashers, al cine de terror de la década de 1990 y al cine de terror independiente que apunta para ser una nueva franquicia. En una época llena de reboots, secuelas y horror social, se agradece que directores como James Wan intenten hacer algo original.
Véanla en el cine y aléjense de los malignos spoilers.
