Lanzado en 1986, el clásico de culto de Tony Scott titulado Top Gun fue un gran éxito entre el público, el momento del estrellato total para Tom Cruise y una herramienta de reclutamiento ideal para la Marina y la Fuerza Aérea de la vida real (no nos olvidemos mencionar cómo impactó en Latinoamérica… Pensemos en Luis Miguel y La Incondicional…).
Después de décadas lejos de la pantalla grande, el imprudente antihéroe de Cruise, Maverick, finalmente regresará en la esperada secuela de 2021 titulada Top Gun: Maverick y la anticipación de los fanáticos está llegando a un punto altísimo. Tal como están las cosas, solo algunos de los miembros del elenco de Top Gun originales regresan, con el interés amoroso original Charlie ausente y el estado del legendario mentor de Maverick, Viper, aún se desconoce.
Pero también se habla de un deceso importantísimo a suceder… Y por eso este artículo.
Aunque muchos espectadores estaban encantados de ver que Iceman, de Val Kilmer, haría un regreso triunfal en la próxima secuela de Top Gun, el propio Maverick sigue siendo uno de los mayores atractivos para los fanáticos de la franquicia. Maverick, uno de los papeles más memorables de la estrella de Misión Imposible, combina el encanto juvenil del actor con la intensidad de sus papeles más oscuros para crear un clásico antihéroe del cine de acción. Esto hace aún más interesante que Maverick pueda morir al final de Top Gun: Maverick. Podría parecer un suicidio de taquilla, dado el amor de los fanáticos de Top Gun por Cruise, pero que Maverick terminara la secuela siendo el cuerpo en el ataúd vislumbrado durante el tráiler de Top Gun: Maverick en realidad tiene mucho sentido.
Según una teoría de los fans, no es el alumno de Maverick ni su amigo Iceman los que acabarán en el ataúd, sino el mismo Maverick. Puede sonar sorprendente, pero teniendo en cuenta lo mucho que la Top Gun original describe la infame “necesidad de velocidad” de Maverick como una obsesión que pone en peligro la vida y que contribuye a la trágicamente temprana muerte de Goose, no es imposible imaginar que este impulso finalmente mata al propio Maverick.
Después de todo, a pesar de su tono divertido, el enfoque de la primera película en la obsesiva necesidad de velocidad de Maverick y la búsqueda solitaria de la perfección presagia la posibilidad de que esta actitud de “vivir rápido, duro” finalmente se ponga al día con el personaje de Cruise a través de la famosa pista de la banda sonora Danger Zone.
En su letra dice todo: Maverick bien podría salir, probablemente sacrificándose a sí mismo en un resplandor de gloria que demuestra que su obsesión resuelta siempre estaba en marcha para eventualmente ser su perdición. Sería un final atrevidamente oscuro para el personaje, pero uno que resultaría temáticamente apropiado para los temas recurrentes de obsesión y su costo humano de la franquicia Top Gun.
