Las peores decisiones de la Academia: películas y actores que debieron ganar - Spoiler Time

Las peores decisiones de la Academia: películas y actores que debieron ganar

Imagen principal de la nota
Los ganadores elegidos por la Academia siempre generan polémica.

Los Premios Oscar han sido el máximo reconocimiento en la industria del cine durante casi un siglo, pero eso no significa que siempre hayan acertado. A lo largo de la historia, han existido decisiones controvertidas que dejaron fuera a grandes películas y actores que merecían la estatuilla. Desde clásicos ignorados hasta actuaciones sublimes que quedaron sin premio, los errores de la Academia siguen siendo tema de debate entre cinéfilos.

Uno de los casos más emblemáticos es el de Ciudadano Kane (1941), considerada por muchos la mejor película de todos los tiempos, que perdió ante Qué verde era mi valle. La visión innovadora de Orson Welles marcó un antes y un después en el cine, y es la más recordada de las dos, lo que hace incomprensible su derrota. Algo similar ocurrió en 1998, cuando Shakespeare apasionado superó a Rescatando al soldado Ryan, una decisión que aún genera controversia.

En el caso de los actores, Al Pacino es un claro ejemplo de injusticia histórica. Durante décadas, el icónico actor fue nominado sin éxito por interpretaciones memorables en El Padrino, Tarde de perros y Serpico. Finalmente, en 1993, la Academia le otorgó el Oscar por Perfume de mujer; no necesariamente su mejor trabajo. Casos similares ocurrieron con Leonardo DiCaprio, quien tuvo que esperar hasta El renacido (2015) para recibir su primer Oscar, a pesar de haber entregado actuaciones extraordinarias en El lobo de Wall Street y Atrápame si puedes.

Actores y directores que nunca ganaron un Oscar

Sorprendentemente, algunas de las figuras más influyentes del cine jamás recibieron un Oscar. Alfred Hitchcock, maestro del suspenso y director de clásicos como Psicosis y Vértigo, nunca ganó en la categoría de Mejor Director, a pesar de haber revolucionado el género. Su único reconocimiento fue un Oscar honorífico en 1968, pero nunca recibió la estatuilla por su trabajo en una película en particular.

En el caso de los actores, Glenn Close es una de las grandes perdedoras de la historia de los premios. Con ocho nominaciones a lo largo de su carrera, ha visto cómo el Oscar se le escapaba una y otra vez, incluso en ocasiones en las que partía como favorita, como con La esposa (2017). Lo mismo ocurre con Amy Adams, quien acumula seis nominaciones sin victoria, a pesar de su talento demostrado en películas como La Duda y Escándalo americano.

El caso de Peter O’Toole es aún más impactante: a pesar de haber sido nominado ocho veces, nunca logró ganar. Su interpretación en Lawrence de Arabia (1962) es considerada una de las mejores de la historia del cine, pero la Academia lo dejó sin premio. Su única estatuilla fue, al igual que Hitchcock, un Oscar honorífico en 2003.

Estos “errores” de la Academia demuestran que, aunque los Oscar sean un símbolo de prestigio, no siempre reflejan el verdadero talento y legado de los artistas. Con el tiempo, muchas de estas decisiones han sido reevaluadas por la crítica y el público, dejando claro que algunos de los mejores del cine nunca necesitaron una estatuilla para ser recordados.

Más en Spoiler Time

Últimos estrenos
JustWatch
Película -
G20
Amazon Prime Video
Serie -
Amigos y vecinos
Amazon Prime Video, Apple TV+
Serie -
El jardinero
Netflix
Serie -
Government Cheese
Amazon Prime Video, Apple TV+
Serie -
La niña robada
Disney Plus