Alguien tiene que morir, la nueva miniserie dramática de Manolo Caro nos sorprendió a todos para bien después que las dos últimas temporadas de La Casa de las Flores tuvieran varios fallos.
Por eso queremos compartirte lo que SÍ y lo que NO nos gustó de esta historia protagonizada por Carmen Maura, Cecilia Suárez, Ernesto Alterio, Alejandro Speitzer, Isaac Hernández, Ester Expósito, Carlos Cuevas, entre otros.
Lo que SÍ nos gustó
1 La crítica social y revisión al pasado
Una de las primeras cosas que nos encantaron de la serie es que representa muy bien el machismo, la homofobia y el racismo, algo a lo que no estamos muy ajenos a pesar de que nos encontramos en el año 2020. También, esta es una crítica que todos podemos entender aunque no vivamos en España. Manolo Caro plantea muy bien estos temas a través de sus personajes y sus actitudes hacia otros.
Crédito: Netflix
2 La historia de Gabino y su amistad con Lázaro
Al principio pensamos que Gabino y Lázaro estaban juntos como pareja, pero no era así. La verdad resultó satisfactorio ver que su amistad no estuviera atada a la masculinidad frágil y tóxica y se atrevieran a mostrar sus sentimientos sin tener que reprimirse por lo que la sociedad de su época (y la nuestra) les impusiera. Además, amamos que Gabino nunca buscara ocultarse y estuviera seguro de ser quien era.
Crédito: Netflix
3 El suspenso
En cada escena se respira un aire de suspenso que casi podemos cortar con una navaja. La música y los sonidos de disparos ayudan mucho a construir un ambiente de ansiedad y desesperación por saber, técnicamente, quién de todos los personajes enmarañados entre sí, morirá al final y a manos de quién será.
Crédito: Netflix
Los que NO nos gustó
1 El desarrollo de la relación entre Mina y Lázaro
Por una parte, nos agrada que el personaje de Lázaro se saliera del estereotipo; es bailarín de danza clásica, pero esto no tiene nada que ver con su sexualidad. Sin embargo, no nos gustó su relación con Mina, fue muy apresurada, y como quien dice, pareciera “amor a primera vista”, pero no lo es. Nos falta desarrollo de su relación y también química entre ellos.
Crédito: Netflix
2 La actuación del reparto
Carmen Maura es la actriz que más sobresale del reparto al entregarnos una actuación fuerte y decidida de la abuela de Gabino. Una señora sin escrúpulos y con una mirada penetrante. También aplaudimos la actuación de Carlos Cuevas, quien se destaca en la escena donde casi mata a palos a Gabino, realmente nos dejó impactados. Pero el resto del elenco, en especial Alejandro Speitzer (a quien le falta más expresividad) y Ester Expósito (quien parece repetir su papel de Carla de Élite aquí), nos quedan a deber.
Crédito: Netflix
3 La precipitación del desenlace
Otra de las cosas que no nos gustaron de la serie fue el final precipitado y abrupto. Aunque en parte lo entendemos. Es una miniserie y no tenía más tiempo para detenerse en cada una de las subtramas y luchas de los personajes. Sin embargo, nos hubiera gustado ver qué pasó con Mina, Gabino y el resto de los personajes tras la muerte de Gregorio, Amparo, Alonso y Lázaro.