Los episodios más espeluznantes de la serie

Con el histórico programa de AMC anunciando su final y Halloween a la vuelta de la esquina, es un buen momento para destacar los capítulos más terroríficos que nos regaló The Walking Dead.

Un espectáculo de violencia, emocionante, siniestro, intenso y un ejemplo perfecto de lo que las personas son capaces de hacer cuando se las empuja a luchar por su propia vida. Un par de protagonistas mueren y todo el grupo se separa.

Una horda impresionante de zombies se dirigen a la granja de la familia Greene haciendo que todos huyan desesperados. Toda la tranquilidad que creían haber encontrado se desvanece en cuestión de segundos. El fuego y los caminantes toman el lugar y las vidas de Jimmy y Patricia de una manera particularmente espantosa.

Los fanáticos de los cómics sabían que se avecinaba la gran revelación de las picas, pero los escritores lo cambiaron y lograron que fuera impactante para ellos y para los seguidores del programa. Instaló una amenaza poderosa y creó uno de los momentos más aterradores del show.

Mientras Daryl y un pequeño grupo se reúnen para regresar a casa, se encuentran con un Siddiq golpeado y descubren que muchos de sus amigos han sido asesinados y decapitados, mientras que sus cabezas fueron colocadas en picas. Ver a los personajes buscar a sus amigos y seres queridos solo para que la cámara los corte rápidamente sin una explicación real es un golpe horrible.

El episodio es, en esencia, una exploración de cómo es sucumbir a la mordedura de un zombie. Cuando los escritores decidieron adentrarse en la mente de Tyreese mientras moría lentamente nos entregaron un momento inolvidable y desgarrador.

Tyreese era un gran personaje: fuerte, sabio y con buenas intenciones, pero incapaz de encontrar su equilibrio. Después de acompañar a Noah en un viaje, es mordido y comienza a alucinar, viendo personajes fallecidos que lo guían a través de su dolor. Da mucho miedo ver la muerte de una persona paso a paso a través de lo que sucede en su mente.

Después de la muerte de Lori, Rick comienza su viaje directo a la demencia, desapareciendo en la prisión infestada de caminantes para desahogar su ira y alucinando. Aún más perturbador que los traumas que atormentan a Rick es que levanta un teléfono comienza a hablar con varias personas.

Mientras que Glenn y Maggie son secuestrados por Merle, Amy, Jim, Jacqui y Lori intentan que Rick acepte la muerte de su esposa a través de escenas que nos dejan la piel de gallina. Nuestro héroe finalmente se recupera y sale a ver a su hija recién nacida por primera vez desde su nacimiento.

La segunda mitad de la cuarta temporada de The Walking Dead ve a los Supervivientes dispersos tras el ataque final del Gobernador a la prisión. Mientras Rick, Michonne y Carl se dirigen a Terminus, son emboscados por The Claimers, un grupo con el que Rick se encontró brevemente a principios de la entrega.

Queriendo venganza por la muerte de uno de los suyos, el líder Joe amenaza con atacar a Carl y Michonne antes de matarlos a todos, y golpea a Daryl por intervenir. En uno de los momentos más icónicos y espeluznantes del programa, Rick se libera y le arranca la garganta con los dientes. Literalmente. Él y sus compañeros luego matan al resto del grupo mientras Carl mira.

Y si eso no fuese lo suficientemente traumatizante, son capturados por una pandilla caníbal al final del episodio.