Este nuevo drama juvenil feminista es atractivo, pero…
Esta última semana llegó a Netflix un dramedy dirigido Amy Poehler, quien además actúa a la par de Hadley Robinson como estelares. La cinta Moxie es la adaptación de la novela de Jennifer Mathieu del mismo nombre publicada en 2015, una historia adolescente que se mete de lleno en la lucha contra el sexismo, la violencia haciendo escuchar las voces de las mujeres.
Además de las mencionadas, cuenta con las actuaciones de Josephine Langford, Lauren Tsai, Josie Totah, Patrick Schwarzenegger, Marcia Gay Harden, Clark Gregg e Ike Barinholtz.
Todo comienza cuando Vivian descubre el pasado activista de su madre, Lisa la fanática de Bikini Kill, quien fue parte de lo que se llama la tercer ola del feminismo. Esto hace que Vivian vea todo con otros ojos. El disparador por el cual no puede seguir conteniendo ni ignorando lo que sucede es la aparición de un listado que puntúa y califica a cada una de las chicas realizado por los deportistas de la escuela.
En secreto Vivian comienza a realizar fanzines con mensajes feministas criticando todo lo que sucede en su instituto. Poco a poco son varias las adolescentes que se unen y hacen que Moxie se convierta en un grupo que lucha por la equidad en la escuela, una que prioriza a los deportistas y limita a las chicas constantemente. Solo Seth (Nico Hiraga), el novio de Vivian, sabe que ella es quien está detrás de Moxie, lo cual trae problemas.
La directora Shelly (Marcia Gay Harden) está detrás de la creadora de Moxie. Esto en un primer momento paraliza a Vivian, más cuando su mejor amiga de siempre Claudia (Lauren Tsai) es suspendida. Está al borde de abandonar todo cuando un mensaje anónimo de una sobreviviente de violación que intenta hacerse escuchar llega a Moxie. Acá tendremos uno de los grandes momentos de la película: Vivian escribe con pintura en la puerta de la escuela cómo se esconden violaciones, cosa que hará que todas salgan a manifestarse. Vivian revela que ella es la creadora de Moxie e invita a todas a pensarse.
Pero…
Ok, Moxie es una historia que entretiene, aunque debemos reconocer que es un poco superficial ya que no es que profundiza en el movimiento o en las distintas luchas que atraviesa el feminismo.
En resumen
Moxie sirve para poder comprender la importancia del apoyo entre las mujeres, respetar los tiempos y las formas en que cada mujer puede y quiere alzar su voz acercando al público adolescente nuevas historias que dejan de reproducir estereotipos y situaciones que sirvieron para perpetuar la cultura del silencio.
A través de su música, estética y humor, este relato para las nuevas generaciones peca de superficial pero cumple en dejar un mensaje de inspiración, apoyo y lucha.