La primera serie turca de Netflix entretiene, pero no sorprende
Los vampiros nunca pasan de moda y, para muestra de ello, ahí tenemos las series de la cadena estadounidense The CW, The Vampire Diaries (2009) y The Originals (2013), que tuvieron éxito gracias a cierta saga vampírica cinematográfica que cambió la cultura pop en 2008.
Si bien con los años han aparecido nuevos dramas que incluyen a estas criaturas, la nueva y primera producción de Netflix en Turquía llamada The Protector se centra en una cultura muy diferente a las que hemos visto con estos seres fantásticos.
La serie de 10 episodios sigue a Hakan (Çağatay Ulusoy), un joven comerciante que sueña con ser un gran empresario. Sin embargo, su mundo cambia drásticamente cuando se entera de que está conectado a una orden antigua y secreta, llamada Los fieles, encargada de proteger Estambul.
Hakan aprende rápidamente que su misión como El protector es proteger su ciudad natal, Estambul, de los místicos Inmortales, unos seres antiguos que destruyen todo a su paso.
Al igual que otros dramas de su género, está basada en la novela de İpek Gökdel titulada Karakalem ve Bir Delikanlının Tuhaf Hikayesi (Una extraña historia de lápiz de carbón y un hombre joven), publicada en 2016.
La producción resalta por sus vistas panorámicas de Estambul, sus escenarios y colores nos hacen recordar la modernidad, pero también el pasado histórico de esta ciudad.
En cuanto a la historia, se nos presenta la clásica formula del viaje del héroe que nos hace sentir que es una trama que ya hemos visto muchas veces tanto en la pantalla chica como en la grande. Tampoco ayuda mucho la construcción del personaje principal, Hakan, pues por momentos puede llegar a desesperarnos con las decisiones poco sensatas que toma. Por otro lado, su acompañante Zeynep (Hazar Ergüçlü) es quien roba toda nuestra atención al ser una chica ruda que sabe muy bien lo que quiere en la vida.
Un punto a favor de la serie es la construcción de su mitología; los inmortales nunca son llamados vampiros y nunca les vemos beber sangre explícitamente. Además se utiliza la cultura otomana para explicar los poderes de los tres talismanes de El protector, lo que la vuelve más interesante.
También cabe resaltar la relevancia del villano principal, pues aunque no nos dicen mucho de él en los primeros episodios, al final descubrimos un hecho que puede darle un giro completo a la historia.
Sin mucho que aportar a su género, podemos decir que si te gustan los dramas históricos, de búsqueda y fantásticos, The Protectorserá para ti. Sin embargo no esperes mucho de esta primera producción turca de Netflix…
Si ya la viste y te encantó, debes saber que una segunda parte ya está en marcha. Únicamente esperamos que sepa enderezar su camino y nos entregue algo nuevo y de verdad jugoso que se haga destacar.