Una vez más Warner Bros. Pictures vuelve a estar en el ojo del huracán, esta vez generada por la polémica que hay alrededor del próximo estreno de Aquaman y el Reino Perdido, ya que un reciente informe ha revelado detalles de la producción de esta película.
De acuerdo a lo publicado por Variety, se dio a conocer los problemas que la producción tuvo con la actriz Amber Heard, quien interpreta a Mera, en la película original y su secuela. Ya que como muchos usuarios de redes apuntaban tras la publicación del tráiler, parecía que su participación había sido borrada, a pesar de que el director James Wan defendía que originalmente así estaba planeado.
Tras el juicio que Heard enfrentó contra su expareja Johnny Depp, se señala que Jason Momoa llegó al set en Londres en estado de ebriedad y vistiendo muy similar al actor de Piratas del Caribe, con el objetivo de desquiciar a su compañera y que esta tomase la decisión de renunciar.
Por otro lado, Heard también señaló una falta de apoyo de Wan como director, quien le levantó la voz y aisló a la actriz de todos los participes en el rodaje, como si se tratase de una paria. En ambos casos, un portavoz de DC dijo que las actitudes señaladas son mentira, confirmando que ambos personajes siempre se han dirigido con respeto hacia todos sus compañeros.
Recordemos que por mucho tiempo existieron rumores sobre un posible reemplazo de Heard en el papel de Mera, señalando que Emilia Clarke entraría a quite, debido a la buena relación que tiene con su excompañero de Game of Thrones. Se dice que el estudio tomó la decisión de esto después del estreno de la primera exitosa película, y no tras el pleito legal con Depp como muchos han dicho, informándole oportunamente a los abogados de la actriz.
Una fuente desconocida señala que la justificación de falta de química entre los protagonistas era mentira, ya que Amber Heard compitió por su papel contra otras actrices, ganando su lugar por la química que logró en las audiciones junto a Jason Momoa. Además se dice que Elon Musk, la entonces pareja de la actriz, amenazó a la compañía de “destruirla” en caso de que decidieran hacer un recasteo.
Sumado a la eliminación de dos escenas en la secuela donde Mera peleaba contra Black Manta (Yahya Abdul-Mateen II) y una de romance junto a Arthur Curry.
