Después de que Scarlett Johansson demandara a Disney por estrenar Black Widow en cines y Disney+ al mismo tiempo, incumpliendo así su contrato, la compañía salió a defenderse.
“Esta demanda no tiene ningún mérito. La demanda es especialmente triste y angustiosa por su insensible desprecio a los horribles y prolongados efectos globales de la pandemia de COVID-19”, dijo un portavoz de Disney en un comunicado (vía THR).
La compañía agregó que han “cumplido plenamente con el contrato” de la actriz y que el estreno de la película de Marvel en su plataforma Disney+ con Premier Access “ha mejorado significativamente su capacidad de ganar una compensación adicional además de los 20 millones de dólares que ha recibido hasta la fecha”.