A casi cinco año de haberse revelado la mala conducta sexual de Kevin Spacey en contra de Anthony Rapp, cuando este tenía 14 años y el actor de The Usual Suspects, 26. Mismas que lo llevaron a ser separado de su papel como protagonista en House of Cards, el problema sigue para el actor que dio vida a Frank Underwood en cinco temporadas.
Tras haber sido obligado a pagar una multa de $31 millones de dólares a MRC –compañía productora de la serie de Netflix– debido a su inapropiada conducta sexual que también mostró durante la realización de la misma, Spacey intentó anular la sentencia, siendo desechada y deberá cumplir con la imposición hecha por la justicia de EE.UU..
La disputa fue enviada a revisión, donde un juez determinó que el actor incumplió su contrato al violar las políticas contra el acoso y no prestar sus servicios “de manera profesional”. También se dictaminó que Spacey no tenía derecho a cobrar el resto de su contrato, a pesar de que éste contenía una cláusula de pago, y que sus incumplimientos provocaron que MRC tuviese una pérdida de dinero al tener que reestructurar la sexta temporada.
Si bien el equipo de abogados del actor peleó por anular la decisión del juez, argumentando que Kevin Spacey no acosó a nadie, y que todo se trataba de bromas que estaban permitidas dentro del set, él mismo dejaba de hacerlas cuando alguien mostraba su incomodidad ante ello. Esto fue desestimado por falta de pruebas.
