A mediados de 1970, un sacerdote católico llamado Michael Clegg pasó de tomar MDMA, el componente activo del éxtasis, como fármaco terapéutico a regalarlo a sus fieles como una manera de llegar a Dios. Para cuando la droga psicoactiva se popularizó en los ‘80, el sacerdote se encontraba produciendo 500,000 píldoras al mes, convirtiéndose finalmente en un capo de la droga y siendo perseguido por la DEA.
Ahora, aquella insólita historia real llegará a la televisión de la mano de OBB Pictures, quien ha comprado los derechos sobre la vida de Clegg para una serie limitada con guion. La producción estará liderada por Elias Tanner de OBB, junto con Jay Shore y Jordan Kronick, quienes realizaron exhaustivas entrevistas al ex sacerdote que rebautizó el MDMA como éxtasis.
“Esta historia creará un drama oscuro y divertido que resalta las retorcidas complejidades de mezclar religión y drogas a través de un personaje único y multifacético”, dijo el presidente de OBB, Michael Ratner.
OBB producirá la serie en asociación con Michael Rotenberg y Jonathan Berry de 3 Arts.