Es un hecho. Ayer por la tarde-noche, el actor Ray Fisher confirmó su salida de The Flash con el importantísimo personaje de Cyborg, que en el arco original del cómic era indispensable (aunque en Hollywood nadie lo es realmente).
El largo mensaje de Fisher señalaba en esencia que, si conseguir justicia con la salida de Walter Hamada como presidente de DC Films es el precio por perder ese papel, lo acepta con gusto (aunque lamenta que las cosas tengan que ser así).
“Sostengo que Walter Hamada no es apto para un puesto de liderazgo y estoy dispuesto, en cualquier momento, a someterme a una prueba de polígrafo para respaldar mis afirmaciones en su contra”, escribió Fisher en aquél tweet.
“No sé cuántos casos de abuso en el lugar de trabajo Walter ha intentado cubrir en el pasado, pero espero que la investigación de la Liga de la Justicia sea la última”.