Desde It’s Spoiler Time les recomendamos muchas series. Incluso les dimos motivos para que vuelvan a ver algún programa que ya vieron, y que en un segundo visionado sumaría bastantes enteros en la consideración del espectador.
Nunca veas de nuevo Caballeros del Zodíaco (Saint Seiya)
Pero no todo es color de rosa y hoy nos ponemos malos, y de paso nos metemos con un anime de culto para varios: Saint Seiya.
Vale aclarar que voy a hablar de lo que se vio en Latinoamérica como Los Caballeros del Zodiaco (es decir, Los arcos de las 12 Casas, Asgard y la Saga Poseidón), sin incluir lo demás.
A continuación, te damos 5 motivos para no volver a ver Saint Seiya.
1 Personajes detestables
Sí, ya sabemos que todas las series, cómics, animes tienen algunos personajes bastante tontos e incluso odiables pese a estar del bando de los buenos. El problema con Saint Seiya, en especial con los de la foto, es que estos personajes eran importantes.
Empecemos con el menos despreciable de los dos, Shun. Sí, sabemos que era un blandengue al extremo y que intercambiaron destino de entrenamiento con su hermano. Pero el problema viene cuando todos dicen que la Armadura de Andrómeda es una de las más poderosas de su categoría, ya que tiene una defensa casi impenetrable y un ataque que siempre consigue dar con el enemigo. Pero no: Shun se empeñaba en demostrarnos que era un inútil y que siempre necesitaba de Ikki.
Lo de Saori es peor. La reencarnación de Athenea, muy poderosa, pero que siempre se ponía en el lugar equivocado y sus leales Caballeros debían salvarla, cuando la chica volvía a tropezar con la misma piedra una y otra y otra vez.
2 Peleas sin pegarse….
Sabemos que las peleas eran lo más interesante del anime, pero si las volvemos a ver de grandes, nos damos cuenta que tienen una cantidad exagerada de diálogos los combates. En especial con ambos contrincantes contándole su vida al adversario, de donde viene cada uno y sus motivaciones. Algo que bien se podría resumir en un clip y agilizar las peleas, que además…
3 … y repetitivas
Las peleas no sólo eran habladas, sino que se tornaban monótonas en más de una ocasión, en especial cuando nuestros Caballeros se limitaban a tirar sus ataques una y otra vez hasta poder romper la defensa del rival, sin usar ninguna estrategia en particular que insistir e insistir e insistir.
4 Capítulos de relleno
Otra cosa que es normal en los anime es que entre arcos argumentales había muchos capítulos de relleno, en especial para indagar un poco más en las personalidades de los personajes.
Pero el problema de Saint Seiya es que muchas veces le daban demasiada importancia a algunos de estos capítulos. Como por ejemplo, los dichosos Caballeros de Acero, que luego nunca más supimos de ellos.
5 Protagonista demasiado perfecto
Sabemos que el protagonista de este tipo de programas debe ser un líder, alguien que inspira valentía a los demás. Pero también sabemos que todo buen protagonista y líder debe tener alguna falencia, un punto flaco en el que el espectador logre conectar con él y no verlo como un ser todo poderoso.
La comparación más común de Saint Seiya es con Dragon Ball, y vale acordarse de que en un arco argumental de DBZ, Goku moría de causas naturales, volviéndolo humano al 100%. Cosa que muy pocas veces sentimos con Seiya.