¿Cuál es el origen de los orcos de la Tierra Media creada por Tolkien?

Después de la erupción del Monte del Destino y el establecimiento de Mordor, la segunda temporada de Los Anillos de Poder presenta nuevamente a Adar y su comunidad de orcos. Este villano, cuyo nombre significa “padre”, es un antepasado de muchos de los orcos de la serie, ya que fue uno de los primeros elfos de la Tierra Media que fue corrompido por el Señor Oscuro Morgoth. Parece que Adar ha aceptado su papel y ha estado luchando sin descanso para crear un lugar donde los orcos puedan vivir libres y seguros. Y tan libres que se llegó a ver a una madre orca cuidando a su bebé, una visión bastante impactante para todos los fanáticos del Universo de El Señor de los Anillos.

Aunque no lo crean, la existencia de bebés orcos encuentra su fuente en los propios escritos de Tolkien… aunque no de manera tan simple de entender o perseguir.

La respuesta corta es: Tolkien nunca se decidió realmente por una respuesta a esto, porque no pudo encontrar una manera de solucionar el problema inherente al concepto de una “raza monstruosa de seres sensibles” antes de morir.

La idea de Galadriel sobre el origen de los orcos en Los anillos de poder es bastante parecida a la de El Silmarillion. Compilado y publicado póstumamente por el hijo de Tolkien, Christopher, dice que “poco se sabe con certeza”, pero “los sabios consideraron cierto” que Morgoth creó a los orcos “mediante lentas artes de crueldad” realizadas sobre elfos capturados en los días oscuros antes de que los Valar pudieran encontrarlos. Las mentes y los cuerpos de estos elfos más antiguos fueron “corrompidos y esclavizados” para convertirlos en orcos “por envidia y burla de los elfos”: la envidia de Morgoth por la singular capacidad de Eru para crear vida. “En lo más profundo de sus oscuros corazones, los orcos aborrecían al Maestro al que servían con temor, el único creador de su miseria. Puede que esta haya sido la acción más vil de Melkor y la más odiosa para Ilúvatar”.

La respuesta más larga es que Tolkien ideó múltiples explicaciones para el origen de los orcos y es posible que hubiera ideado otras si hubiera tenido más tiempo. En los primeros borradores, Morgoth creó a los orcos a partir de piedra. En la década de 1950, Tolkien escribió la versión que Christopher eligió para El Silmarillion, en la que se creía generalmente que los primeros orcos eran elfos corruptos. Pero en años posteriores, Tolkien comenzó a lidiar con revisiones radicales y fundamentales de la cosmología de la Tierra Media que finalmente nunca pudo terminar ni finalizar. Y en estos años, parece haber visto la contradicción de que es totalmente heroico matar orcos en cualquier oportunidad, a pesar de que, en El hobbit y El señor de los anillos, parecían tener libre albedrío.

Después de todo, los orcos de Tolkien tenían rangos militares. Discutían entre ellos, se quejaban de sus órdenes y contaban chistes sádicos. En muchos sentidos, eran el producto de las experiencias personales más desgarradoras de Tolkien como soldado de infantería en el ejército británico de la Primera Guerra Mundial: un pueblo que siempre estaba en guerra, burocracia y obediencia mezquina, sin un sentido de comunidad o solidaridad más allá de obedecer órdenes. Mordor era una trinchera, llena de la peor gente y los peores oficiales, una guerra sin hermandad ni causa honorable excepto “el jefe te lo dijo”.

En su nuevo origen de los orcos, Tolkien exploró la idea de que los orcos podrían haber sido creados a partir de humanos corruptos, elfos, espíritus incorpóreos y bestias, tomados por Morgoth y moldeados en una parodia de las creaciones de Eru. En estos orígenes, el dios oscuro y fuente de todo mal los imbuyó de su propia voluntad y naturaleza, para que pudieran pelearse e incluso traicionarlo, pero solo porque estaban impulsados ​​por su odio universal hacia todos los seres vivos, incluidos ellos mismos.