Desde su lanzamiento en noviembre de 2019 hasta la actualidad, Apple TV+ ha destacado por ser una plataforma que busca la calidad en sus contenidos y no la cantidad. Con base en ello ha desarrollado historias que cuestionan tópicos del acontecer actual como The Morning Show y el tema del acoso laboral en la industria del entretenimiento; Little America que le da la vuelta a las historias de racismo y xenofobia contadas por los afectados; se suma a esta lista su nueva serie de comedia negra: Physical.
Rose Byrne da vida a Sheila Rubin, una ama de casa que vive junto a su familia en San Diego, California, durante la década de los 80. Cansada de su vida rutinaria como madre y esposa, ella encuentra refugio en dos cosas: el baile y la comida rápida, dos opciones completamente distintas entre sí que la hacen olvidar, por un momento, a su insoportable marido Danny (Rory Scovel), quien está frustrado por un despido injustificado de la escuela donde trabajaba y que ahora busca un puesto en la administración pública de la ciudad donde viven.
A través de esta premisa, la creadora Annie Weisman (Suburgatory) nos lleva por un viaje a través de la vida de Sheila, quien constantemente lucha con ser la mujer ideal para su familia, en todos sentidos, y la mujer que en realidad quiere ser, sin importar lo que la sociedad piense de ella, porque ella tampoco piensa lo mejor de todos.
La serie destaca por darle un giro a la cultura de la cancelación y la corrección política que se vive en muchas producciones audiovisuales, porque a través del pensamiento de su protagonista, el cual escuchamos en voz en off, revela las opiniones reales y severas que hacemos de la sociedad y de nosotros mismos. Por medio de esta válvula de escape metida como un gran elemento narrativo de la historia, vemos las más duras críticas que puede verter un ser humano de otro, sin olvidar el elemento principal de la serie: la cultura del cuerpo, que en el tiempo que se ubica la serie estaba determinado por cánones de belleza como Jane Fonda y Farrah Fawcett para las mujeres.
Otro punto a notar es la relación que existe entre la comida y la ansiedad, caso que queda remarcado por el comportamiento de Sheila al comer hamburguesas dentro de un cuarto de motel. El ritual que lleva a cabo para consumir este producto puede ser gracioso al inicio, pero como avanza la historia se convierte en un proceso doloroso con el cual busca sanar profundos dolores que tiene. Es aún más admirable, que la serie retrate estos problemas con la comida a través de una persona delgada que tiene un cuerpo socialmente aceptable y no con alguien con sobrepeso, lo cual muchas veces se ha hecho antes.
Todas estas líneas narrativas nos llevan al gran momento de descubrir que sin el baile en la vida de Sheila, encuentra una segunda pasión en los aerobics, mismos que la harán soñar en su libertad personal donde no cabe su fastidioso marido, ni su pequeña hija, ni todos esos pensamientos que la atormentan día tras días. Solo es ella y su más grande pasión.
Como ya es costumbre en las producciones de Apple TV+, sus valores de producción son de alta calidad y esta vez se superan en el diseño de producción que nos lleva al pasado a sentir la experiencia de los 80 cuidando a detalle la estética del show. Todo eso apoyado por un soundtrack que retoma canciones de la época que hace un acompañamiento perfecto.
En resumen, Physical podría llegar a molestar por las duras críticas que hace a la apariencia física, pero su estructura narrativa tan bien diseñada la hacen inmune a ello y usa eso a su favor para contar una historia sórdida sobre la cultura del cuerpo a través de la comedia negra y el cuestionar todas esas ideas que se dieron en el pasado.