¿Qué podemos esperar de Duna: Parte Dos?

Tras una larga espera, por fin podremos experimentar Duna: Parte Dos, del director Denis Villeneuve, en cartelera.

Duna: Parte Dos “explora el mítico viaje de Paul Atreides (Timothée Chalamet) mientras se une a Chani (Zendaya) y a los Fremen en un camino de venganza contra los conspiradores que destruyeron a su familia. Enfrentado a la elección entre el amor de su vida y el destino del universo conocido, Paul intentará evitar que suceda un futuro terrible… que sólo él puede prever”.

Y por si aún no sabes que esperar de Duna: Parte Dos, queremos compartirte algunos detalles que te harán emocionarte más. 

La princesa Irulan —hija del Emperador Padishah Shaddam IV y protegida de la Reverenda Madre Mohiam de la Bene Gesserit— es una joven elegante y regia con una mente estratégica y una naturaleza observadora. Cuando se convoca su opinión sobre cómo manejar una posible rebelión en Arrakis, no se achica a la hora de ofrecerla, por impopular que resulte. Sin embargo, aunque su padre es un maestro del juego de ajedrez, a ella le perturba comprender que el verdadero poder del emperador proviene de tratar a su pueblo como peones, sabiendo que lo único que importa es que, al final, él gane.

Felino, musculoso y con la alopecia en todo el cuerpo típica de los Harkonnen, la inteligencia de Feyd-Rautha Harkonnen es equiparable a su crueldad… y emplea ambas en combate, lo que lo convierte en un enemigo realmente formidable para cualquiera que se cruce en su camino. Puede ser, tan solo, que el Barón Harkonnen tenga planes mayores para este sanguinario sobrino suyo, quien tiene un retorcido sentido del honor y una pasión por el dolor, tanto del ajeno como el propio. Las habilidades de Feyd se pondrán a prueba fuera del ring de entrenamiento de gladiadores cuando lo envíen a pelear contra un enemigo inesperado.

Tan enigmático como carismático, con unos ojos que delatan sus rasgos por lo demás inescrutables, el Emperador, al igual que las Bene Gesserit que le guían, destaca en la manipulación estratégica. Sólo sus allegados pueden discernir si sus acciones —o su inacción— son una carga pesada para él. Al dirigir a aquellos que componen la Casa Atreides y la Casa Harkonnen como si fueran piezas en un tablero de ajedrez Keops, el premio que busca no es, ni remotamente, la preciada mercancía que se conoce como Especia, sino el poder universal que ésta trae a quien la controla.

A pesar de llevar el porte sereno de una Bene Gesserit, Dama Margot Fenring se ve seducida por el poder animal de Feyd-Rautha Harkonnen cuando éste demuestra sus habilidades despiadadas en combate. Sin embargo, es su comprensión de la estrategia de la Reverenda Madre Mohiam y su capacidad altamente perceptiva para ver los planes dentro de los planes lo que convierte a Dama Fenring en una misteriosa figura en la sombra que explora, en silencio, las perspectivas de la estrategia a largo plazo de la Madre Mohiam.

Shishakli, la amiga más cercana y antigua de Chani en el Sietch Tabr, es una aliada divertida y leal a su camarada Fremen del norte, y una dura luchadora. Habla alto y rápido y con honestidad, pero también escucha a Chani cuando necesita compartir sus pensamientos, ya sea sobre las diferencias en las formas de pensar antiguas y nuevas entre su pueblo, o sobre el creciente interés de Chani por Paul Atreides.

Villeneuve reveló que Duna: Parte Dos “es, en el fondo, una historia de amor” y espera que “el público se sienta conmovido por la relación entre Paul y Chani”.

Chalamet describió a Chani como “una especie de brújula moral de Paul” para su personaje. Además, “siente que es similar a ella, que es digno, éticamente, e intenta convertirse en un compañero para ella, en el hombre que desea ser para ella, y crecen increíblemente cerca”.

Zendaya explicó que Chani “empieza a ablandarse con Paul porque él es sincero” y “quiere ganarse su respeto y su confianza”. También porque al igual que ella, “rechaza la idea de esta vida a la que su madre le ha, más o menos, obligado, la idea de que él es el elegido” y eso “reconforta” a Chani.

Esta escena, que se adelantó en los tráilers, es una de las más esperadas de la película. Al respecto, Chalamet dijo que “se rodó a lo largo de tres meses” y que es “un momento muy importante en la entrada de Paul en el mundo de los Fremen, significa su aceptación a su comunidad (aparte de Chani y Stilgar, por supuesto), y fue muy importante hacerlo bien”.

Villeneuve expresó que montar gusanos “es una de las cosas más cool de la novela”, pero que “una cosa es leerlo y otra cosa es verlo”. Para ello, tuvo que “definir y crear” por sí mismo “la lógica y la técnica sobre cómo subirse a un gusano de arena”. El director “quería que pareciera lo más real posible” y quiso “rodar bajo la luz del sol verdadera y sobre una estructura que se pareciera al gusano”.

Villeneuve detalló que “requirió mucha paciencia y fue tan experimental que es, con diferencia, la secuencia más compleja que he hecho”.

Villeneuve explicó que Roger Yuan, su coordinador de lucha en la primera película, regresa para la secuela. Yuan “tiene un enorme conocimiento de todos los tipos de lucha y combate” y “su coreografía define las diferentes formas de luchar de los Fremen, los Harkonnen, los Atreides y los Sardaukar”.

Además, Yuan retomará su rol de Lanville, que “tiene un gran enfrentamiento en esta película, y fue agradable profundizar más con él”.

Austin Butler dijo que para convertirse en Feyd-Rautha entrenó con el doble de acción y ex Seal de la Marina Duffy Gaver, así como con Yuan, con quien tiene un combate en la película. “Sabía que las escenas de pelea serían muy duras y quise que parecieran potentes, por lo que entrenamos mucho. Hicimos mucho Kali, que es la lucha filipina con palos, y mucho trabajo con cuchillos”, detalló.

Butler agregó que tuvieron que “encontrar el estilo de pelea de Feyd” para diferenciarlo del de Paul, quien se entrenó con los Atreides y los Fremen.

Hans Zimmer regresa como compositor. Villeneuve contó que seis meses después del estreno, Zimmer “seguía trabajando en la banda sonora original de la película”. Zimmer le dijo que era música para él, para que se inspirara para escribir la Parte Dos.

Para esta película, Villeneuve quiso que compusiera música para “Feyd-Rautha y el mundo Harkonnen, y también para el Emperador”. Aunque, lo más importante para él, era que Zimmer “escribiera algo inolvidable para Chani, Un tema de amor, el amor de Paul por Chani. Quería algo descorazonador y el tema de amor más hermoso jamás escrito y, sinceramente, creo que lo consiguió”.

Villeneuve agregó que cuando la escuchó por primera vez, lloró.