Por estas razones la primera temporada es IMPERDIBLE y DEBES verla

Es cierto que son días inciertos, y que la vida de muchas personas se ha visto seriamente alterada, debido a las medidas sanitarias mundiales, pero no podemos olvidar que también han sido semanas inolvidables para la comunidad trekkie/trekker, con el regreso de uno de los personajes más emblemáticos de la saga Viaje a las Estrellas: el valiente y carismático capitán Jean-Luc Picard.

El regreso de Patrick Stewart para una serie que se centra en su personaje y por primera vez “avienta” muchísimos años en el futuro a la saga –como en su momento hiciera Star Trek: The Next Generation– fue una gran promesa que, podemos decirlo ahora con seguridad, cumplió las expectativas de hasta los más exigentes con creces.

Es por eso que, si no lo has hecho, te recomendamos con firmeza que veas un buen maratón de Star Trek: Picard en Prime Video ahora mismo (con los 10 episodios ya disponibles) y compruebes por timismo, seas trekkie o no, cómo es una de las mejores series de ciencia ficción de los últimos tiempos… y sí, te estamos hablando a ti también, Doctor Who y The Mandalorian.

Estas son las razones por las que no puedes perderte el show.

Sin abusar de CGI (pero sin tenerle miedo tampoco), se respetan la edad y las circunstancias del protagonista. Tuvimos un Picard más sabio y mesurado, pero también viejo, confundido y… ¡con una enfermedad terminal (que estamos seguros estuvo relacionada con ESA cirugía de extracción ex-borg)!

Aunque hay claros nodos con los temas legendarios de Jerry Goldsmith y Alexander Courage, el score de Jeff Russo en esta primera temporada es fabuloso, dando identidad propia tanto a la serie como sus personajes principales, pero sin dejar de lado las memorias auditivas de quienes disfrutamos de Star Trek, The Next Generation y hasta Voyager hace años.

Akiva Goldsman y su equipo de escritores lograron dar congruencia a la nueva serie con prácticamente todas sus versiones anteriores, sin siquiera meterse con la locura de la línea Kelvin de JJ Abrams o las tremendas irregularidades de Enterprise y Discovery.

Sencillamente una de las mejores historias escritas para TV, ¡y eso que la temporada 12 de Doctor Who y la 1 de The Mandalorian fueron muy buenas también!

¡Ni modo, te ganaron Tarantino!

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Hay malas palabras en Picard y hasta en varios idiomas (ese capitán Ríos es un loquillo), y aunque francamente a veces nos pareció excesivo, es bueno ver que la serie ha madurado en este respecto… Ya no podríamos decir que es una serie “para toda la familia”.

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Eso fue lo que planteó Gene Roddenberry desde un principio y es hermoso ver que la premisa está de vuelta, sin escenas forzadas ni complacientes como lo que vimos en Star Trek: Sin límites o Discovery.

“La bondad” y “la maldad” tienen varios tonos de gris y llega un punto en que el espectador no sabe de qué lado ponerse…

Obviamente (aunque no siempre) un buen guión lleva generalmente a un gran final, y máxime si el plan es hacer más de una temporada. Pues bien, tan asombroso fue ese último acto extendido y el entrañable cliffhanger, que ya hay luz verde para una temporada 2.

🙂 🙂 🙂

Algo genial, más allá de ver a Hugh, Data, Riker y otros personajes del pasado de Picard, fue la forma en la que los nuevos coprotagónicos cuentan con una asombrosa profundidad (que envidiarían muchos personajes de TGN, por ejemplo) y la forma en la que las buenas actuaciones y el estupendo guión lograron atraparnos desde el primer hasta el décimo episodio.

Definitivamente la serie sobre Picard está diseñada para esta era digital, la del streaming. No vemos otra forma en la que, de una forma sí semanal pero global gracias a Prime Video (y su respectivo CBS All Access), lo cual ha permitido que fans de antaño y nuevos adeptos por igual aclamen y comenten la serie semana a semana, en redes sociales.

Simplemente el  sueño de Roddenberry hecho realidad.