Retrokids #2: Los verdaderos Cazafantasmas

En épocas donde el éxito de un filme generaba no solo gran cantidad de productos sino también una serie animada, esta no fue la excepción. Hoy: Los verdaderos Cazafantasmas.

Seguramente si estás leyendo esta nota se te venga a la mente la versión femenina que se estrenó en cine en 2016, aunque quienes rozan los 30 o 40 recuerden la serie animada que se había desarrollado luego del exitoso filme de 1984.

Columbia, que se había encargado del filme, hizo lo mismo para la creación de la serie. Filmation, famosa por adaptar series como GI Joe o He–Man, era la primera opción para llevar adelante la serie animada. Pero a último momento, Columbia decantó por DIC y Coca Cola Telecomunicaciones.

Sin embargo Filmation fue rápida y se quedó con los derechos del nombre y de paso aprovechó eso para adaptar una serie que casualmente se llamaba igual, donde incluía a un gorila. Esto forzó a Columbia, Coca Cola Telecomunicaciones (ambas se fusionarían formando Sony Pictures) y DIC a rebautizar su show como Los verdaderos Cazafantasmas.

La serie funcionó como puente argumental entre el filme y su secuela (siendo el episodio 11 de la primera temporada una secuela directa) con los libros de J. Michael Staczynki y Michael Reaves (futuro productor de Batman, la serie animada). Los verdaderos Cazafantasmas tenía un tinte terrorífico en las primeras dos temporadas: en Netflix pueden encontrar la serie y verán, lectores, que los primeros episodios son como ver una película resumida de 22 minutos, literalmente.

Lamento decirles que eso cambiaría a partir de la tercera temporada, con la marcha de los dos guionistas que mencioné antes. El hecho fue que Slimer, mejor conocido como Pegajoso había tenido una gran repercusión en el programa; por eso se optó a rebautizar el show como Pegajoso y Los Cazafantasmas. Nada volvió a ser lo mismo.

Las cacerías continuaban pero se añadió más comedia y paulatinamente cada historia tenía moralejas. El cambio más radical fue el de dividir los episodios en dos.

La enorme repercusión de la serie influyó en la secuela del filme donde Pegajoso tuvo mayor protagonismo. Con el estreno de la segunda película se introdujo más tarde al personaje de Louise a la serie animada, quien se convertía en pareja eventual de Janine.

Y acá se me genera una duda: si bien Jeanine, la secretaria de Los Cazafantasmas que estaba perdidamente enamorada de Egon, en la serie animada lucía mucho más atractiva (había demasiados estereotipos en los personajes), siempre me pareció que los guionistas querían explorar la homosexualidad de Egon, aunque no de manera explícita.

El desarrollo de los personajes era infaltable: la dinámica entre Pegajoso y Peter, el buen humor de Ray o la seriedad de Winston.

Sobre el final de la serie, se retomó el espíritu original, pero ello no impidió que sea precipitada su cancelación en 1991 tras 147 episodios en 7 temporadas.

Luego del final de la serie, se pensó en la tercera película de Los Cazafantasmas, que no pasaba de rumores. Los cierto es que Bill Murray era uno de los motivos de su “no” realización: desde renegar con su rol, hasta criticar la serie animada porque su personaje sonaba como Garfield (Lorenzo Music le daba la voz al gato en la serie animada y Murray irónicamente haría lo mismo años más tarde en la película del felino… tremenda curiosidad, ¿no?)… todo le venía mal a Murray.

Lo cierto era que Murray quería enfocarse más en roles serios que en comedia como lo era la saga Los Cazafantasmas. Tal vez eso fue la excusa para que no solo Peter sino también Winston y Ray ni aparezcan en Cazafantasmas Extremos, la nueva serie que se había estrenado en 1997.

Con una animación mas caricaturesca, Cazafantasmas extremos o La nueva generación se diferenciaba de otros relanzamientos por ser una secuela de la serie original, situándose 10 años después del final, con Egon como mentor de un grupo de adolescentes. También estaban Jeanine y Pegajoso del elenco original.

Los nuevos no dejaban de ser reencarnaciones de los personajes originales: Kyle, la chica del grupo, era la Egon; luego estaba el rebelde del grupo, Eduardo, que sumando su dinámica con Pegajoso recordaba a Peter; Roland, parecía condenado a ser el nuevo Winston, no solo por compartir rasgos, sino por ser el serio y quien manejaba el Ecto–1; Garrett, si bien recordaba a Ray, era el más novedoso por andar en silla de ruedas y ser entusiasta.

La serie había retomado el espíritu original de su predecesora y tuvo un excelente cierre con un episodio doble que contó con el regreso de los miembros originales con motivo de festejar el cumpleaños de Egon.

Con solo dos temporadas, al finalizar la serie, se abrieron las esperanzas para el tercer filme, que incluyó un guión que había recibido Murray y devuelto en pedazos. No fue hasta 2014 cuando se anunció que la película entraría en producción.

Si bien previamente había tenido comics y videojuegos con los personajes originales, la muerte de Harold Ramis había paralizado la realización del filme. Con ello se optó en introducir nuevos personajes: ya no serían hombres, sino mujeres quienes cazaran fantasmas.

Las críticas por los fans más acérrimos no pararon en llegar: mientras que una minoría alababa el filme, lo cierto es que los números no ayudaron a que se realizaran secuelas.

Sin embargo, a través de comics, la película continuó con sus aventuras, cruzándose incluso con el equipo original en Ghostbusters 101, una colección limitada.

La fiebre de Los Cazafantasmas no termino ahí: se había anunciado una película animada y el rumor de un film protagonizado por hombres (dirigido por los hermanos Russo, pero desmentido). Finalmente, se estrenará, por lo visto, una nueva serie titulada Ecto Force en 2019, y su acción transcurriría en 2050.

Los Cazafantasmas son un icono de los 80, e  incluso tuvieron su referencia en la aclamada Stranger Things y seguro captó nuevos fans.