Muchos la consideraron como una de las peores series de los 80, pero realmente el resultado fue distinto. Una serie donde un helicóptero de alta tecnología fue el centro de atención y logró ser una serie de culto: Airwolf o mejor dicho Lobo del Aire.
Retroseries #17: Airwolf

1 Despegue
Aunque Airwolf inició sus transmisiones en 1983, la idea ya rondaba en la cabeza de Donald Belissario desde mucho tiempo antes, donde la intención era hacer un spin-off de la serie Magnum PI mediante un episodio.

Pese a que los números no fueron a su favor, Belissario confío en la idea y siguió redondeándola hasta poder materializar la idea en torno a un helicóptero de alta tecnología, capaz de evadir radares, lanzar misiles y superar distancias inusuales.

La Guerra Fría jugaría un papel fundamental donde se establecería en una realidad alternativa, la cual nunca hubiese terminado. Las bases estaban pero sólo quedaba buscar una cadena por distribuir y delinear el casting sobre la tripulación que conduciría al Lobo de aire.

Los productores tenían en vista una historia donde un científico creaba un helicóptero de avanzada tecnología, pero celoso de compartir su creación, este decidía huir por lo que La Firma, la compañía para la que trabajaba, enviaba a Hawke, el piloto de pruebas que había conducido al Airwolf.
Sin embargo este tenía otros problemas que resolver, como la búsqueda de su hermano, por lo que una vez que llega a recuperar al Airwolf logra un pacto con la compañía turbia para darles a cambio diferentes misiones con la condición de ser ayudado en su búsqueda.
Para Hawke se pensó en Jan-Michael Vincent, quien tenía un gran repertorio en películas y series. Ernest Borgnine interpretaba a Santini, su compañero.

Mientras, de la otra vereda, Alex Cott y Deborah Prett interpretaban al director de La Firma y a Marella respectivamente. Este último era la mano derecha del primero.
De esta forma, Airwolf vio su debut en 1984 con un piloto de dos horas que funcionó como posible película televisiva en caso que los números no acompañen.
2 Clave: complicaciones
La CBS había quedado conforme con los números de la primera temporada donde giraba en torno a la recuperación del Airwolf, pero con ganas de mejorar las calificaciones, se pensó en agregar un personaje femenino.
Los tintes de guerra (las cuales abarcan a la Guerra Fría y Vietman) eran los mayores atractivos, pero el Airwolf también tenía lo suyo durante sus apariciones, para lo cual incluso se utilizaban aullidos de lobo reales (para justificar el nombre).
Entrada la segunda temporada, Caitlin O’Shannessy se añade al reparto interpretada por Jean Bruce Scott, quien ya era conocida por haber participado en Magnum PI. Con su personaje como una piloto, hubo también un cambio de tono centrado mayormente en la acción con el fin de hacer una historia más familiar.

Tanto esta temporada como la otra situaban a los protagonistas como aliados de La Firma con el fin de cumplir diferentes misiones involucradas con varios atentados y conflictos políticos. Pero pese a haber persistido esto, y hasta buscando un antagonista en la tercera temporada con RedWolf (Lobo Rojo), los números fueron bajando pese a los esfuerzos de Bernard Kowalski como productor ejecutivo; no se logró salvar la serie, que terminó en su cancelación luego de tres temporadas.
Los problemas que condujeron a que fuera cancelada no sólo fue el cambio de tono, sino también que los problemas de alcoholismo que acarreaba su protagonista Jan-Michael Vincent.
De todos modos, USA Network, una cadena de cable de aquél entonces, se mostró interesada por la serie, por lo que ordenó una nueva temporada.

Con un nuevo reparto y apenas teniendo algunas conexiones con sus personajes anteriores, Airwolf tuvo 24 nuevos episodios que intentaba recuperar el espíritu de la primera temporada. Sin embargo, con guiones ya terminados antes de abrir el casting, además de la ausencia de Airwolf, no sólo hubo personajes poco desarrollados sino la presencia de muchas tomas reutilizadas, que condujeron al final de esta serie.
3 El verdadero Airwolf
Esta es una de las pocas series ochentosas que no tuvo continuación o spin-off, pero sí Airwolf superó las barreras del tiempo y este es uno de los recuerdos que uno tiene por sobre los personajes.

En realidad el verdadero Airwolf era un Bell 22, que tras el final del programa fue vendido y utilizado como una ambulancia en Alemania hasta 1992 cuando tras una tormenta se estrelló y mató a los tres tripulantes luego que dejaran a una niña en el hospital.

Años más tarde se construyó una replica que estuvo a la venta en Ebay.

En 1987 y hasta 1989 salieron a la venta videojuegos de Airwolf, donde la jugabilidad consistía en rescatar personas y derribar aviones enemigos.
Además hubo varias referencias en otras series y películas afines.

La serie Airwolf pese a su producción y su maltrato por parte de las productoras y público, será recordada por tener un helicóptero de lo más avanzado.