Los mayores secretos sobre la producción de Goodfellas

Goodfellas es, sin lugar a dudas, uno de los clásicos más exitosos del cine. Lo sabemos: la viste mil millones de veces, no tenemos que recordarte nada de ninguna escena… ¿pero y del detrás de cámara? Hay muchas cosas que aún no sabes sobre la película y aquí te las contamos.

Es difícil imaginar a alguien que no sea Ray Liotta y Lorraine Bracco como Henry y Karen Hill, respectivamente, pero no fueron los primeros que se postularon para los papeles.

Tom Cruise fue considerado para el papel de Henry Hill, pero Liotta logró convencer al productor Irwin Winkler de que encajaba mejor. Madonna, por otro lado, era una opción de reparto más cuestionable porque no tenía mucha experiencia, pero de alguna manera estaba en los planes para ser la exigente esposa de Hill que luego fue interpretada por Bracco.

Catherine Scorsese interpreta a la madre de Tommy en la película, quien por supuesto aparece después de que los chicos matan a Billy Batts (sin que ella lo sepa) y les prepara la cena. Cuando Scorsese dirigió a su madre en la escena, no le dijo que los personajes de la película acababan de matar a alguien y tenían el cuerpo escondido en su auto, por lo que ella era tan ingenua como su personaje.

Charles Scorsese aparece como Vinnie, el hombre en prisión que hizo la salsa de tomate que Henry consideró que tenía demasiadas cebollas, pero que “seguía siendo una salsa muy buena”. Vinnie está más tarde presente en la ejecución de Tommy.

Al Pacino tardó hasta 2019 en protagonizar finalmente una película de Martin Scorsese, pero no fue la primera vez que al actor se le ofreció un papel en una de sus películas.

A Pacino se le ofreció inicialmente el papel de Jimmy Conway, el socio irlandés-estadounidense de la familia criminal Lucchese, quien finalmente fue interpretado por Robert De Niro. Según IMDb, Pacino supuestamente rechazó el papel por temor a que lo encasillaran en ese rol.

La próxima vez que veas la película, querrás tener en cuenta que algunos de los extras de la película son en realidad verdaderos mafiosos, o al menos eso es lo que afirma Nicholas Pileggi.

Según Pileggi, los mafiosos reales fueron contratados como extras para dar autenticidad a las escenas. Dadas sus ocupaciones, supuestamente le dieron números de seguridad social falsos a Warner Bros., por lo que se desconoce cómo recibieron sus cheques de pago.

Aunque podría decirse que es la escena más conocida de toda la película, la realidad es que no estaba en el guion en un principio. De hecho, el momento se basa en una experiencia que tuvo el actor Joe Pesci cuando trabajaba en un restaurante.

Pesci le dijo algo así a un mafioso en el restaurante una noche, y obtuvo una respuesta igualmente poco entusiasta. Una vez que el actor le contó la anécdota a Martin Scorsese, decidió incluirla en la película. Sin embargo, el director decidió no incluir la escena en el guión para provocar reacciones genuinas de sorpresa en el elenco.