Desde el comienzo de los tiempos, Brooklyn Nine-Nine es una serie que cree en la igualdad entre los hombres y las mujeres. No sólo por algún comentario que Jake pueda haber hecho, sino que el tener personajes femeninos tan fuertes, hace que sea inevitable tomar partido en esta lucha que las mujeres deben pelear día a día. Por ende, al primero que diga que está tratando de ser políticamente correcto voy a tener que decirle que no estuvo prestando mucha atención. Entonces, si algo le faltaba a Brooklyn era poner tener un episodio como el de esta semana, que como frutilla del postre, fue el debut detrás de cámara de Stephanie Beatriz, la actriz que hace de la gran Rosa Díaz. Obviamente sin dejar de ser una comedia, Brooklyn pudo hablar de un tema que todas las series deberían abordar y vamos a hablar de esto por un ratito.
No sé si es necesario repasar la historia porque ya todos la vimos, pero el tema de discusión creo que debe ser el trato que le dieron a esto sin hacerle creer al mundo que es todo una utopía. En cada uno de los tópicos que se tocaron en el episodio, hubo mucha conciencia real de lo que pasa en el mundo y se trasladó a la pantalla perfectamente. Por ejemplo, las dos conversaciones de Rosa y Amy, las ganas de luchar de la Sargento de los uniformados, “la normalidad” para las mujeres de tener que vivir esto todos los días y hasta el uso de Jake para escuchar porque a él solo le correspondía hacer eso. Ya me meteré en detalle con cada uno de estos puntos, pero por ahora, tenemos que sentarnos a disfrutar que tendremos una nueva temporada de Brooklyn Nine-Nine confirmada, porque se necesitan estas series.
Uno de mis momentos preferidos del episodio fue la primera charla entre Rosa y Amy. Rosa creía que lo que estaba haciendo su compañera sólo la estaba perjudicando a la víctima ya que se iba a quedar sin trabajo y sin la plata necesaria para poder seguir adelante. Sabía que este tipo de casos siempre lo ponen al hombre en un buen lugar y por eso creía que aunque sea triste, debía asegurarse que la chica que sufrió el abuso salga con algo de todo esto. Si bien entendía lo que Amy quería hacer, estaba siendo realista y aunque el mundo a veces puede ser esa utopía que deseamos, en el 97 por ciento de la ocasiones, no lo es. Por eso, también se valora muchísimo que Rosa la haya felicitado por la pequeña victoria que tuvieron porque al final del día, un paso adelante, es mucho más que ninguno.
Si bien todo esto fue importante, algo que también lo fue, ha sido la conversación de Amy con Jake. Una de las cosas que el hombre no sabe hacer es escuchar, apoyar y no tratar de hacer un problema que no es suyo, propio.Amy le contó la realidad que viven las mujeres todos los días y si bien, gracias a lo mucho que están haciendo los movimientos feministas, la gran mayoría ya sabe qué pasa en el mundo, todavía hay gente que no lo hace. Nosotros conocemos a Amy hace mucho tiempo, sabemos lo capaz que es y no tenemos dudas que si quisiese ser el reemplazo de Holt cuando él ya no esté, ella lo podría hacer con los ojos cerrados. Por esto mismo, es tan tremendo lo que un hombre le causó a Amy, le hizo dudar de sus capacidades e hizo que la mejor persona en el mundo tenga miedo y esté insegura siempre.
Era importantísimo que Jake escuche eso, que se dé cuenta que en los momentos cotidianos o en cosas importantes como puede ser un trabajo, las mujeres sufren todo tipo de injusticia. En cualquiera de los ejemplos que vimos notamos esto, no importaba si era ir a buscar un latte o si era ser respetada por su trabajo, el ser mujer siempre era un traba y en este episodio, todas fueron lo suficientemente fuertes para decir basta. Sí, vimos que Rosa tenía razón, que hubiese estado bueno que la víctima haya podido evitar el cambio de vida luego de todo lo que sucedió, pero también pudimos ver que alguna tiene que sacrificarse por la causa y que eso, ayudará a que todas las que pasaron por eso, sepan que no están solas, que hay alguien que va a luchar con ellas y que hasta que el mundo no sea un lugar el que todas puedan vivir tranquilas, no se detendrán.
De fondo tuvimos en el capítulo nuestro querido Capitán Holt queriendo sentirse joven otra vez. La verdad es que siempre es muy divertido verlo en el campo, pero verlo en el capo, apuntándole con un arma a un anciano, creo que le gana a muchas versiones del capi. Igual, siento que ya habíamos pasado por esto cuando Amy reabrió un caso viejo sin querer algunas temporadas atrás. Pero no me voy a quejar si nos muestran a un Holt orgulloso y con terror cada vez que aparece un Yo-Yo, así que vamos a disfrutarlo mientras que podamos. La realidad es que todo lo que estaba sucediendo en el capítulo era muy fuerte y aunque siempre me divierte verlo a Raymond, puede que hubiese estado mucho mejor quedarse todo el episodio con Jake y Amy, ya que ellos eran los que realmente importaban. ¿El debut de Stephanie Beatriz? Excelente.