Las fiestas ya han terminado y poco a poco comienzan nuevamente nuestras series favoritas. Así que ya en este 2017 tenemos un nuevo episodio de Chicago PD, en esta vuelta de mitad de temporada seremos testigos de un crossover con Chicago Fire, otra de las series pertenecientes a la franquicia Wolf ambientadas en Chicago.
Todo comienza porque el bombero Kelly Severide es el sospechoso principal en un homicidio vehicular. Así que la unidad de inteligencia deberá hacer todo lo posible por demostrar que realmente es inocente ya que el bombero no recuerda nada de todo lo sucedido.
Esto traerá algunos roces entre la policía de Chicago y los bomberos ya que estos últimos quieren que la policía haga todo por liberar a Kelly, algo que Voight y su equipo quieren hacer pero Hank no quiere que los acusen de favoritismo.
También tenemos a Erin, quien tuvo un pequeño romance hace un tiempo con Kelly, que es la única que está convencida que él es inocente. Esto hace que tenga alguna discusión con Jay. Aunque en realidad Erin confiesa lo que realmente pasa por su cabeza, su padre biológico salió de prisión y quiere verla, así que eso la tiene algo distraída.
Por otra parte en este episodio veremos a Kim Burgess en su primer día como parte del equipo de inteligencia. Voight le aclaró que sólo hará papeleo algo que ella cumple. Pero su primer día le hará saber no solo que su ex y actual compañero Adam Ruzek sigue queriéndola sino que además Alvin Olinsky no le dará una cariñosa bienvenida. Él considera que ella es una groupie de los policías, por las relaciones que tuvo dentro de la estación, pero Kim le asegura que le demostrará que no es así.
Retomando el caso que nos une con Chicago Fire, la unidad de inteligencia logró encontrar un gps en el Mustang de Kelly. Esto los llevó a descubrir que en realidad el bombero fue víctima de un equipo de delincuentes que se encargaban de robar autos de lujo. Ellos fueron quienes provocaron el choque que terminó en homicidio. Esto hace que Voight y su equipo encuentren a esta banda logrando liberar a Kelly dejándolo libre de culpa y cargo.