Primero debemos hacer una mención: gracias a este episodio Grey’s Anatomy rompe un nuevo récord y se convierte en la serie médica con más capítulos emitidos.
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Ahora sí comencemos. Vemos a Jackson Avery; está organizando una fiesta para su madre, aunque pareciera que todo termina en fuego. También seremos testigos de muchas revelaciones.
Meredith le oficializa a Alex que está con De Luca. Es divertido ver cómo él la molesta por eso y le recuerda que ella por varios años atormentó a Jo. En su rol de jefe le deja en claro que debe informarlo en Recursos Humanos.
Maggie estará alterada gran parte del episodio: Kiki publicó un artículo donde minimizaba un poco lo que Maggie hizo para salvarla. Será Richard quien la haga reflexionar para que aproveche ese artículo a su favor.
Es divertido ver la charla de Cat y Miranda sobre ser millonarias. Catherine intenta evitar la fiesta y Miranda consigue eso que tanto soñó: aconsejada por Cat, se compró esa licuadora carísima.
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Durante la fiesta, Meredith intenta que no la vean besándose con De Luca, pero Richard los encuentra en la habitación de huéspedes. Amelia y Owen discuten: se enfrentan a haber perdido a Leo y Betty, haciendo que Shepherd decida abandonar a Hunt.
En la fiesta también veremos la oficialización del romance de Teddy y Tom Koracik, algo que a Owen no le agrada.
Alex y Jo tendrán sus problema porque Helen Karev está en Seattle. La familia se reencuentra, y si bien ellos piensan que está teniendo un brote, es la única que se da cuenta que el lugar está en llamas.
Luego de que Miranda logre convencer a Cat de ir a la fiesta, todo se prende en fuego. Por suerte nadie salió herido. Pareciera que quien ocasionó todo fue Meredith cuando, sin querer, colocó bandejas de plástico en el horno.
Catherine escucha los consejos de Miranda y deja de temerle a la vida.
También las cosas se complican para Amelia y Owen: los padres de Betty vuelven a llevarle a Leo para que ellos puedan adoptarlo.
Por último, De Luca no solo descubre que su hermana regresó, sino que su padre está en Seattle.