El capítulo anterior terminó con cierta calma, si bien los enemigos de James nunca se alejan demasiado, con el tratado de las tierras en mano, las cosas parecían estar un poco más tranquilas.
Aunque no esté viva la madre de Delaney es un personaje recurrente, que aparece en pesadillas pintada de blanco y en escenas trivales que atormentan a su hijo, quien la tiene idealizada como una mártir.
Pero al principio de este episodio Brace le confiesa a James unas cuantas cosas que tenía guardadas: su madre no sólo estaba loca, sino que trató de ahogarlo cuando era un bebé, por eso su padre la encerró.
Así comprendemos por qué en las visiones de Delaney siempre hay agua – no sólo por el naufragio al que sobrevivió – y una extraña mujer que con la cara pintada de blanco parece estar llevando a cabo un ritual.
Sin dudas el agua es un elemento con el que James tiene una estrecha relación, siempre está cerca del agua, muchas veces con la mitad del cuerpo sumergido, y sin ninguna razón, como si ese elemento lo comunicara con algo más, y siempre es parte de sus visiones y pesadillas.
Delaney desaparece por unos días, boyando entre el muelle y la precaria fábrica de pólvora que monto en un galpón. Pero su desaparición no pasa desapercibida para Lorna, quien sale a buscarlo aunque Brace con mucha calma le diga que hay dos cosas que son ciertas: no está ni muerto ni feliz.
Lorna decide visitar a Zilpha para ver si sabe algo de James, pero la recibe su esposo borracho, que no hace mas que molestarla y contarle los rumores que hay sobre Delaney: que es un diablo africano, come carne humana, etc. Pero Lorna parece haber visto cosas peores en su vida, y los rumores no la preocupan. Cuando Zilpha finalmente aparece, tiene la cara golpeada, y la trata con frialdad, haciendo todo lo posible para que se vaya.
Su extraño compartamiento tiene una razón, y es que ya no soporta a su marido, al que mata un par de escenas más adelante, dejándolo tirando en la cama, sin ningún arrepentimiento.
Siempre hay algún momento en cada capítulo donde Delaney deja de lado los fantasmas y desarrolla alguna estrategia brillante, con alguno de esos finales donde todo sale redondito.
En este episodio eso sucede cuando la pólvora esta lista y James se la entrega a los norteamericanos.
Teniendo en cuenta la clandestinidad de la fabricación, atravesar Londres con barriles de explosivos no parece una opción. Así que el grupo, con James a la cabeza, llena seis ataúdes con pólvora y los lleva por la ciudad en plena noche, dentro de un lúgubre y elegante coche fúnebre.
Siempre un paso adelante, Delaney y Dumbarton se encargaron de esparcir la falsa noticia de un brote de cólera, así resultaría creíble que la peste fue la que se llevó a los “muertos” que trasladan, y ningún soldado se atrevería a revisar los ataúdes por miedo al contagio.
Con la pólvora entregada y el trabajo bien hecho, Delaney vuelve a casa a descansar, pero allí lo espera Zilpha quien tranquilamnete le confiesa que ha matado a su marido y que ya pueden estar juntos.
Como la mujer no es consciente del problemón en el que se está metiendo, es James quien debe ocuparse del cadáver, y que su hermana vuelva a su casa, a actuar como una viuda afligida.
Apenas unos minutos después de enterrar a su esposo aun tibio, Zilpha y James
finalmente descargan toda la tensión sexual que contuvieron durante media temporada.
La apasionada escena es interrumpida por las visiones de James quien se va a caminar al muelle rumbo a su oficina, cuando un carruaje le interrumpe el paso y dentro de él un miembro de la compañía lo amenaza con una frase contundente: “La guerra ha comenzado” segundos después el barco de James explota por los aires.
Delaney se agarra una terrible borrachera para lidiar con el asunto mientras piensa cómo hará para llevar a cabo sus planes sin un barco.
Como suele hacer cada vez que esta desesperado, borracho o demente James se va al agua, y en la orilla del mar se encuentra a Winter, a quien echa con desprecio.
A la mañana siguiente James despierta de su borrachera con la cara en el barro, y a metros de el, Winter esta muerta.