Apenas inició el episodio, fuimos testigos como los competidores recibieron una invitación especial: “Estimado Chef, no comas porque tienes una invitación para comer en un restaurante cinco estrellas”, decía la tarjeta que apareció por debajo de la puerta de las habitaciones de los participantes.
Pero al final, todo fue muy confuso. Los Chefs llegaron a un restaurante Vips y ahí se encontraron con el Chef Aquiles Chávez quien les presentó a cada uno un plato que estaba tapado con una campana. Cuando levantan las tapas, resulta ser que los platos estaban completamente vacíos(WTF?).
Esa fue la base para la primera prueba de la noche.
Pobres Chefs, ellos pensaban que iban a comer delicioso, pero nada es tan fácil cuando quedan tan pocos competidores.
Esta Prueba de Fuego consistió en que los participantes debían preparar el platillo que Vips les envió para la cena a través de su entrega a domicilio la semana pasada… ¿Lo recuerdan?
El tema fue que los Chefs se pasaron compartiendo entre ellos sus pedidos de la cena, por lo que degustaron varios platos, y la memoria gustativa de cada uno estaba completamente perdida.
Como Vips es una franquicia, y la calidad de sus alimentos debe ser exactamente la misma en cada uno de sus locales, los participantes estaban obligados a recrear a la perfección los platillos. Ese fue el verdadero desafío.
Ya en la cocina, Aquiles Chávez sugirió a los participantes cuánto tiempo necesitarían para esta prueba. Gabriel sugirió media hora, debido a que no conocen bien la cocina, pero inmediatamente después Diego dijo: “20 minutos”, por lo que elevó la apuesta. Finalmente, es el doble de tiempo de la entrega en los restaurantes.
Para esta prueba, el Chef Aquiles contó con la ayuda del Chef Ejecutivo de Vips,Roberto Santillán, para evaluar los platillos de los participantes.
“A veces lo más fácil resulta ser lo más difícil”, dijo Roberto. Y sí, los platillos sencillos y rápidos terminaron por complicar a nuestros participantes que están acostumbrados a otro tipo de cocina.
Juan, que no compartió su platillo con su compañeros en el momento de la cena, aprovechó su buena memoria culinaria y su sandwich California fue el ganador de esta Prueba de Fuego.
Además, le entregaron una estrella. Hasta este momento no sabríamos cuál sería la función de la misma… ¿una ventaja? ¿una inmunidad?
Apenas arrancó esta etapa, fuimos descubriendo qué hay detrás de la estrella. Los Chefs recibieron la visita sorpresa de sus mentores.
El mentor de Juan es el Chef Gilles Nordin, Director Gastronómico de los hoteles Quinta Real; el mentor de Ix-chel es su padre, Don Ignacio Ornellas; el mentor de Gabriel es el Chef Eduardo García, propietario de Máximo Bistrot;Daniel tiene como mentor al Chef Carlos Gaytán, propietario del restaurante Mexique de Chicago; y el mentor de Diego es el Chef Pedro Martín, del restaurante Kaye.
El reto consistió en lo siguiente: Cada Chef se encontró con una canasta en sus estaciones. En las mismas, estaban los ingredientes que sus mentores seleccionaron especialmente para ellos. Así, debían estar no sólo a la altura de las expectativas de los jueces, sino que de sus propios mentores. Contaron con dos horas para preparar sus platillos.
Después de esos intensos 120 minutos en la cocina, llegó la hora de que los Chefs evalúen los platos.
Es ahí cuando sabemos el verdadero uso de la estrella de Juan. Y la evaluación se dividió en dos partes.
Primeramente, los Chefs eligieron al ganador. Cada uno de los mentores poseía una estrella que colocarían en el que para ellos fue el mejor platillo. El chef que posea más estrellas se adjudicaba como ganador.Juan podía usar su estrella en el momento del anuncio del ganador, teniendo la ventaja de tener una estrella extra… pero si su plato no tuviera votos, podría formar parte de los peores y es ahí donde también podría usar su estrella para salvarse en la segunda etapa de la deliberación La decisión de cuando usar esta ventaja fue del propio Juan, quien astutamente decidió reservarla para la segunda etapa (es decir, la decisión de la eliminación).
En una decisión casi unánime y con cuatro estrellas a su favor, Ix-chel enamoró con su mole que supo fusionar lo mejor de México con toques de la cocina española y francesa. Un platillo con alma.
Los cuatro platillos restantes tuvieron sus errores y aciertos, para los jueces fue una decisión más que complicada y a estas alturas de la competencia no pueden dejar pasar ni siquiera los detalles.
Juan dejó su estrella frente a su platillo, pero Daniel y Gabriel quedaron salvados por los jueces al llevarse dos estrellas cada uno.
Así, Juan (con su estrella) y Diego (sin estrella) quedaron en el bottom two. Ahora la decisión fue de los jueces, que anunciaron que Juan quedaba salvado al vencer la Prueba de Fuego y respetaron su antecedente; esto significó que el Chef Diego Sobrino, Chef Ejecutivo del Grupo Only Ó,fue el eliminado de este episodio. Su plato fue perfecto, pero le faltó sazón. La falta de sal en su platillo fue inaceptable a esta altura de la competencia.
Y fue la segunda eliminación para Diego, que retomaba la contienda después de que Najla cediera su lugar al quedar lesionada en medio en la competencia.
