Muchos personajes femeninos con estilo aparecieron y desaparecieron de la TV, pero ningunos de ellos dejó esa huella que Carrie Bradshaw marcó entre los fans de la moda y las series.
Desde el momento en que apareció en la pantalla, mujeres de todas partes comenzaron a admirar su increíble sentido fashion y a tomarla como referente a la hora de vestir. Y así es como vimos la evolución de la serie, también vimos evolucionar el vestuario de las cuatro amigas neoyorkinas, que mientras iban escalando en sus vidas profesionales y personales, también comenzaron a lucir marcas de alta gama como Manolo Blahnik, Dior y Chanel.
La gran responsable de que hoy todos recordemos a este personaje de Sarah Jessica Parker como una mujer elegante y atrevida a la hora de vestirse es Patricia Field, diseñadora y estilista que Parker conoció en 1994 y quedó completamente fascinada por su trabajo. Así, fue ella quien recomendó a su gran amiga para vestir a los actores de Sex and The City. Field no sólo cautivó a los expertos de la moda y a los fans, sino que obtuvo una nominación al Oscar a Mejor Vestuario por su trabajo en la película The Devil Wears Prada.