A principios del mes de marzo, y luego de un innecesariamente controversial y poco atinado artículo del New York Times, un mar de quejas en redes sociales en tono a un personaje animado lograron lo que hace años sería impensable: eliminar por completo a un personaje de una película… supuestamente por considerarse “un símbolo inspirador al acoso y el abuso”, el zorrillo galán Pepe Le Pew.
Y de nada sirvieron las quejas de la hija de Chuck Jones, o el que la actriz Greice Santo haya ofrecido una recompensa de $100 mil dólares a quien le entregara la escena borrada donde aparecía con el zorrillo. Pero no. Le Pew no aparecerá no sólo en Space Jam: A New Legacy, sino en cualquier proyecto de WB a largo plazo.
¿Por qué es un error terrible?
Sencillamente porque, tal como los absurdos debates en contra de la ausencia de curvas en Lola Bunny o el “racismo” hacia Speedy Gonzales por ser “morenito y con sombrero” han superado el absurdo de algo que, desde su concepción, jamás había tenido como motivo ofender o ser un mal ejemplo para nadie (menos para los niños).
“Es tan importante tener esta escena en la película, para inspirar a generaciones jóvenes, así como a las de antes, sobre cómo corregir ese comportamiento”, dijo Greice Santo a Uproxx. “Siento que esa escena era una forma de mostrarle a los chicos que esa clase de comportamiento no está bien“.
La escena en cuestión –como les informamos en su momento– era en un escenario estilo Casablanca, donde Le Pew es un cantinero que trata de conquistar al personaje de Santo, quien termina propinándole un buen golpe cuando éste consigue besar su brazo. Momentos más tarde, Pepe confiesa a LeBron James que la gatita Penelope Pussycat consiguió una orden de restricción contra él, a lo que el basquetbolista aconseja que ya no toque a otros sin su consentimiento.
¿Dónde estaba lo malo en eso?
No obstante, WB respondió a Santo: “Es un crimen solicitar a otro robar y distribuir propiedad de Warner Bros.”
Al final, eliminar de esa forma un personaje inocentemente creado en 1945 se antoja más como la exageración de una generación extremista, a quienes haber dado la razón podría abrir puertas a la censura de decenas de personajes más… animados o no.
¿Quién sigue en la lista? ¿Un psicópata Will E. Coyote? ¿Un violento Taz? ¿Una acosadora Pucca? ¿Un energúmeno Donald Duck?