¿Cómo puede afectar la novela Los Testamentos a la trama de la serie?

Más de 30 años le llevó a Margaret Atwood escribir la continuación de El cuento de la criada. La novela, publicada por primera vez en 1985, tuvo recién en este 2019 su segunda parte, que se tituló Los Testamentos. 

En esos más de 30 años, El cuento de la criada tuvo múltiples adaptaciones a otros formatos, entre las que se destaca la serie de Hulu, que estrenó en el 2017 y lleva ya tres temporadas, más una cuarta confirmada. 

En El cuento de la criada, Atwood nos presenta a la República de Gilead, una nación surgida de un golpe de Estado que derrocó a los Estados Unidos como los conocemos. En Gilead, las mujeres se encuentran reducidas a su más mínima expresión: esposas, criadas, martas, tías, etc., todo en nombre de Dios. La violencia, la corrupción y las injusticias son moneda corriente en esta nación distópica, que nos horroriza principalmente porque no resulta tan imposible.

En su primera novela, Atwood nos cuenta esta historia a través de June, una mujer destinada a criada dentro de Gilead, que intenta por todos los medios escapar. Mientras que la novela termina casi exactamente donde finaliza la primera temporada de la serie (con June nuevamente atrapada por Gilead), también cuenta una suerte de epílogo ambientado más adelante en el tiempo, en el que distintos profesionales se reúnen para estudiar el fenómeno de Gilead, anunciándonos así que el régimen ha caído y que poco se sabe de esos días tan oscuros de la humanidad. 

En el show que tiene como protagonista indiscutida a Elisabeth Moss, la caída de Gilead todavía se encuentra lejana, pero sin duda la revolución ha comenzado. Esa revolución, encabezada por el grupo Mayday, es clave en Los Testamentos, la segunda novela escrita por Atwood. En ella, la autora nos cuenta la caída de Gilead a través de la voz de tres personajes que ya conocemos: Tía Lydia, Nicole y Agnes/Hannah. 

Tras leer Los Testamentos, debemos preguntarnos cuánto afectará esta novela al desarrollo de la serie. En primera instancia, para seguir los pasos de Atwood, el show debería realizar un gran flash-forward, ya que Nicole es todavía una bebé que poco puede colaborar en la destrucción de Gilead. Por otro lado, June debería quedar relegada a las sombras, algo que la mayoría de nosotros no veríamos con malos ojos, ya que la última temporada casi que agotó al personaje, vapuleándolo entre una revolucionaria guerrillera y una demente producto de la doctrina Gilead.

Sin dudas, la última temporada de The Handmaid’s Tale bajó su nivel respecto a sus predecesoras. La historia de Gilead comenzó a saturarse en su propio círculo de perversidad, por lo que la aparición de Los Testamentos puede ser una bocanada de aire fresco, marcándole el norte al show hacia un final más interesante. ¿Se animarán a pegar semejante salto en la pantalla chica? ¿O la caída de Gilead también dependerá de la ya súper mujer June, como todo lo demás?

No tenemos dudas de que la historia de The Handmaid’s Tale es tan interesante como necesaria en estos tiempos que corren, pero mucho de eso se debe al talento de la autora que creó la obra original. Por eso, creemos que la serie debería comenzar, con su cuarta temporada, a adaptar lo nuevo de Atwood, Los Testamentos, y así llegar al final que Margaret eligió para su universo.