Aunque muchos imaginaron que Illumination podría llegar a representar una seria competencia para Pixar, los proyectos de este estudio han sido en su mayoría bastante regulares. Si bien las premisas de Illumination han sonado emocionantes en papel, su ejecución final siempre se ha limitado a apelar al gusto del público infantil. Lo anterior no es del todo negativo, pero tampoco requiere la complejidad narrativa a la que Pixar nos tiene acostumbrados con sus animaciones. Considerando lo anterior, The Secret Life of Pets 2 sigue la misma fórmula a la que Illumination se ha adherido desde sus inicios: una historia que visualmente es atractiva y que tiene personajes entrañables, pero que solo será gratificante para los más pequeños del hogar.
Aunque es muy sencilla, la historia de la secuela resulta más entrañable que la original
En The Secret Life of Pets 2, Max (Patton Oswalt) sufre de ansiedad cuando Katie (Ellie Kemper), su dueña, da a luz a su primer hijo. Al inicio, esta ansiedad se debe a las travesuras que le hace el pequeño, pero conforme pasa el tiempo, el niño crea un lazo emocional importante con Max, quien siente la necesidad de protegerlo todo el tiempo. Gracias a unas vacaciones en el campo y a la ayuda de Duke (Eric Stonestreet) y Rooster (Harrison Ford), un perro pastor, Max volverá a confiar en sí mismo y a disfrutar la vida perruna que le otorga Katie. Sin embargo, la situación se complica cuando Snowball (Kevin Hart) y Daisy (Tiffany Haddish) traen a un tigre blanco llamado Hu al edificio, al cual quieren proteger del abuso que sufre a manos de su dueño en el circo donde se encuentra atrapado. Junto con Gidget (Jenny Slate), Chloe (Lake Bell), Buddy (Hannibal Buress) y Mel (Bobby Moynihan), el clan de las mascotas buscará la forma de salvar a Hu y encontrarle un nuevo hogar.
A diferencia de la cinta original, The Secret Life of Pets 2 sí muestra lo que hacen estas mascotas cuando sus dueños no se encuentran cerca. Con esto en mente, el guión decide contar la historia en tres partes: una trama principal que sigue a Max y Duke y dos tramas secundarias que encabezan Gidget y Chloe y, por otra parte, Snowball y Daisy. Eventualmente, todos los personajes se reúnen para el clímax de la cinta, pero la separación que el guión hace en un inicio permite que la película cuente una historia mucho más sencilla y ordenada que la del debut de estos personajes en el cine. No obstante, esta división también hace que la narrativa se sienta en extremo infantil, como si se tratara de tres aventuras individuales que al final, por necesidad, conforman un largometraje.
En lo que respecta a la parte visual, Illumination nunca se ha caracterizado por tratar de imitar la realidad en la medida de lo posible. A diferencia de las texturas y figuras tan reales que Pixar ha logrado recientemente con Toy Story 4 (2019) o Coco (2017), The Secret Life of Pets 2 mantiene una animación que se inclina más hacia el terreno de la caricatura con personajes que no guardan las mismas proporciones que sus contrapartes en la vida real. Sin embargo, esto también permite que las mascotas resalten visualmente las características de su personalidad y, por ende, resulten más entrañables para un público infantil.
En el tema del doblaje al español, las únicas voces que serán conocidas para el público mexicano son las de Eugenio Derbez como Snowball, Mariana Treviño como Daisy y Mónica Huarte como Gidget. La historia y los personajes no demandan un doblaje de gran dificultad y la adaptación que se hace del guión al español tampoco sugiere que se realizaron cambios tan drásticos como en otras franquicias (piensen en Shrek, por ejemplo), pero aún así se agradecería que existiera la oportunidad de ver la película en su idioma original. Siendo honestos: ¿a quién no le gustaría escuchar a Harrison Ford interpretar a un perro pastor como Rooster/Gallardo o escuchar el trabajo de Patton Oswalt como el sustituto de Louis C.K. en el papel titular?
Incluso cuando una tercera parte resulta improbable por los resultados en taquilla que ha tenido esta secuela alrededor del mundo, The Secret Life of Pets 2 es una agradable visita a estas singulares mascotas. Superando por mucho la confusa y sosa trama de la cinta original, la segunda aventura de Max y Duke resulta entrañable por la sinceridad con la que se aproxima al conflicto que vive el protagonista y al aprendizaje que obtiene a raíz de este.