Las lecciones que The Walking Dead debería aprender de su spin-off - Spoiler Time

Las lecciones que The Walking Dead debería aprender de su spin-off

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FTWD es superior hoy día a TWD. Te explicamos por qué.

Es bastante claro para cualquiera que vea ambas series que The Walking Dead ya no es el principal show de zombies de la televisión. Su propio spin-off, Fear the Walking Dead, lo ha superado de varias maneras, y hay muchas lecciones que el programa para padres podría aprender de ello.

1 Arriesgarse a perder personajes

¿Cuándo fue la última vez que The Walking Dead nos sorprendió al desaparecer a un personaje? Sí, el giro de Carl se desvió de los cómics, así que fue una sorpresa, pero también llegó en un final de mitad de temporada donde se sentía como una muerte inevitable. Las muertes más importantes antes de Carl fueron Glenn y Abraham, pero hubo tantos spoilers que… MEH. Probablemente tengas que volver al pobre Noah en la puerta giratoria para la última desaparición sorpresa… e incluso entonces, Noah era un personaje relativamente menor.

 

 

Fear the Walking Dead, por otro lado, acaba de matar a su segundo personaje más grande en el episodio 3 de su última temporada, lo que razonablemente esperarías que fuera un episodio sin nada genial. Fue un gran movimiento que nadie vio venir. Aún mejor es que no se sintió como un shock por el simple hecho de estarlo: matar a un miembro de la familia en el corazón del programa abre caminos de trama fascinantes para los personajes sobrevivientes, y sugiere que nadie está a salvo.

2 Locaciones

The Walking Dead no se siente como si estuviera ambientado en el mundo real, existe en su propio purgatorio personal. Hace tiempo que la serie dejó atrás a Atlanta y ahora está sumida en un bosque sombrío que nadie deja nunca.

Debido a que la serie se filma en el mismo lugar cada temporada, incluso los viajes a otros lugares (por ejemplo, Oceanside) que podrían proporcionar variedad, todavía se sienten parte del mismo bosque mediocre. Todos en este extraño limbo pasan su existencia peleando entre ellos, todo dentro de los confines de su bosque misteriosamente infinito, y simplemente nunca termina.

FTWD, mientras tanto, cambia de escenario regularmente. La primera temporada se estableció en el centro de LA, la segunda entre el océano abierto y México, mientras que la tercera se estableció en un rancho tejano. Esto no solo permite contar historias más variadas, con un elenco diverso, sino que también permite que la serie amplíe su paleta visual.

En teoría, esto hace que el espectáculo sea mucho más llamativo y dinámico.

3 Humor y calidez

Honestamente, ¿ha habido alguna vez una serie más sombría que The Walking Dead? Verlo se siente como una prueba, y no a causa de un impacto emocional agotador, sino porque es tan implacablemente turgente.

Sí, esta es una serie sobre la supervivencia del fin del mundo, pero ¡por Dios, bromeen de vez en cuando! Solo la mano derecha leal y afable de Ezekiel, Jerry, es quien trae el más mínimo rayo de sol al espectáculo. Es el héroe anónimo de los últimos días, y debe ser protegido a toda costa.

En Fear The Walking Dead, la familia Clarke actúa como lo que son: una familia. Bromean entre sí, incluso en los tiempos oscuros, de una manera que Rick y Carl casi nunca hicieron. Esa familiaridad, aunque a menudo se fractura, también les permite cierta calidez, algo que es escaso en el programa madre, sin importar qué tan seguido Rick proclame que todos son una gran familia.

4 Sentir empatía, sentir la realidad

Es extremadamente raro que alguien en The Walking Dead alguna vez discuta el mundo pre-apocalipsis.

Las reflexiones de Carl en su carta a Rick – sobre la pérdida de la “pizza del viernes por la noche” y el tiempo en familia – fueron refrescantes, porque casi nadie en el programa recuerda sus vidas pasadas, las cosas que extrañan, las personas que perdieron. Ninguno de ellos gime por no poder llamar por una pizza; ninguno de ellos está molesto porque nunca llegaron a saber cómo terminó Game of Thrones (¿?)… Simplemente aumenta la naturaleza inerte de la serie: es como si el viejo mundo nunca existiera, y hace que los personajes se sientan menos a personas reales. Son solo cuerpos huecos, condenados a vagar sin cesar por su bosque / purgatorio por toda la eternidad.

Los personajes de Fear the Walking Dead, en parte como resultado de no estar tan geográficamente unidos, por estar en ese derrotero eterno, constantemente encuentran restos del viejo mundo, ya sea Otto con su rancho lleno de comodidades o un antiguo estadio de béisbol convertido, por citar dos ejemplos.

Un ejemplo muy fuerte es la cámara de video de Althea que vemos ahora mismo: la serie encontró una manera muy directa de comprometerse con el pasado de su personaje al documentar sus historias; se puede decir que una vez hubo una civilización y que estas personas vivían vidas antes que los caminantes; fundamenta el miedo en el mundo real, nuestro mundo, y lo convierte en un escenario postapocalíptico más identificable.

5 Un camino propio que se forja paso a paso

Fear the Walking Dead es una historia original, no basada en ningún cómic preexistente, y también tiene la libertad de hacer lo que quiera. The Walking Dead, hasta la desaparición de Carl al menos, se mantuvo en gran medida fiel a su material fuente basado en el cómic. Han cortado y cambiado algunas cosas aquí y allá, pero en términos generales, es la misma historia que se traduce a la pantalla.

Con el interés disminuyendo en la serie, ha llegado el momento de dejar de lado el material que antecede al show madre. Es más: el primer cambio de los cómics de la serie fue inventar el personaje de Daryl, ¡y ha sido el personaje más perdurable de la serie desde que comenzó!

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